Julián Bastías Santander fue diagnosticado a temprana edad con Trastorno del Espectro Autista (TEA). Hoy, con 18 años, logró obtener 1.000 puntos en la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES), específicamente en la evaluación de matemáticas.
Según explica en una conversación con El Mercurio de Valparaíso, para Julián fue crucial contar con el apoyo del Colegio Panal donde estudiaba, mencionando que quedó "totalmente agradecido" y que el colegio le "abrió las puertas".
965 puntosPromedió Julián en sus Notas de Enseñanza Media (NEM)
Esto se debe a que durante su infancia, Julián estudió primero en la Escuela Los Sagrados Corazones, y luego pasó por distintos colegios tradicionales para finalmente llegar al Colegio Panal, el cual fue fundamental para su adaptación estudiantil por el hecho de que estos ofrecían un proyecto de integración.
"El colegio me abrió las puertas, y ahora que estoy donde estoy puedo permitirme estudiar en la universidad"
Julián Bastías
Mariella Santander, la madre de Julián comentó por el mismo medio que ambos de sus hijos tienen TEA, y que el camino que han tenido que recorrer "no ha sido fácil", pero que su doctor finalmente pudo "darlo de alta", y gracias a eso Julián "ya no toma ningún tipo de medicamento hace dos años". De todas formas, a pesar de estos desafíos Julián logró sobresalir en su proceso escolar, por lo que ambos reiteran su gratitud hacia el colegio que lo formó.
"Su doctor, Juan Carlos Martínez la dio de alta y él ya no toma ningún tipo de medicamento hace dos años. Él aprendió a manejar toda la parte emocional"
Mariella Santander, madre de Julián
Tras dar la prueba y recibir sus impresionantes resultados, estudiar Ingeniería Civil Física en la Universidad Técnica Federico Santa María (UFTSM) se convirtió en una asegurada posibilidad. Esta siempre fue una de sus principales opciones, ya que le permitiría algún día cumplir su sueño de trabajar en la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), o en cualquier otro lugar que se asemeje y que trate con números y física.
Julián Bastías representa un arduo camino de superación personal ante los desafíos de su vida. Ahora solo está a la espera de las postulaciones para finalmente poder cumplir su sueño de ingresar a la universidad.