La semana pasada, la clínica RedSalud Mayor Temuco cerró de manera definitiva su área de maternidad. Pero esto no respondió a problemas técnicos o de escasez de personal, sino que a la enorme caída del número de mujeres embarazas que acudían por un parto. Llegó un momento en que a la semana atendían dos nacimientos. Y ya son varios los recintos de salud que han achicado su área de maternidad o derechamente las han cerrado en los últimos años, entre ellos la ex clínica Tabancura o el Hospital Militar (cuya área se fusionó con la del Hospital de la FACh), lo que refleja la poca cantidad de partos en Chile. Eso es justamente lo que muestran los datos del Registro Civil. Mientras en 2014 hubo 251.011 nacimientos, la tendencia fue fuertemente a la baja hasta 2021, cuando se registraron 177.306. Y pese a que en 2022 se quebró esa caída y fueron 189.336 los nacimientos, 2023 cerró con la caída más fuerte de los últimos años, con solo 173.920. Al hacer un zoom a las regiones, la variación más abrupta se aprecia en la Metropolitana: si en 2022 nacieron 78.175 lactantes, en 2023 la cifra cayo a 70.605. En algunas zonas extremas, como Aysén, durante el ultimo año la cantidad de nacimientos no superó los 910. Enrique Oyarzún, ginecoobstetra de Clínica Universidad de los Andes, dice que "la tendencia claramente es a la disminución, y los políticos y el Ministerio de Salud tienen que preguntarse qué van a hacer con eso, porque genera grandes problemas para el futuro".