La Fiscalía y la PDI obtuvieron la imagen de Maickel Villegas -uno de los prófugos- en una bomba de bencina en La Granja, después del secuestro la madrugada del 21 de febrero.
El Mercurio
Mientras el entorno del fallecido ex militar Ronald Ojeda se encuentra de duelo, el caso sigue adelante y entre los antecedentes incorporados recientemente en la investigación surgieron pistas que ubicarían la casa de seguridad que habría servido como lugar de cautiverio -o de paso- del ex uniformado en la zona sur de Santiago. Los secuestradores habrían llegado hasta las cercanías de calle Lo Blanco, en San Bernardo. En específico, a un pasaje pequeño y entre dos blocks de edificios de tres pisos, donde colaboradores no identificados habrían ayudado a los plagiadores a ocultarse. Y la misma investigación arroja que esos desconocidos taparon con sábanas o frazadas a los captores de Ojeda para ocultarlos de la vista de los vecinos, dado que llegaron vestidos con falsos trajes de la PDI: esa fue la indumentaria que usaron para ingresar al departamento el ex teniente y sacarlo por la fuera. Se presume que la apariencia de policías podía causar alarma entre los residentes del lugar.