El Presidente
Gabriel Boric abordó este lunes el aniversario de los dos años de su gobierno, reconociendo que lo más duro fue el "golpe" sufrido en el Plebiscito constitucional del 4 de septiembre y que pese a los cambios y dificultades a los que han tenido que enfrentar tiene "la convicción" de que han "cumplido", mejorando la vida de los chilenos.
En medio del aniversario por los dos años de Gobierno, Boric fue consultado en Radio ADN por si no cree que su coalición a veces es muy desafiante. Ante ello, indicó que "en este trabajo y en la posición que me toca estar todo es profundamente desafiante, así que no lo veo como una excepcionalidad. Ahora, nuestra coalición política tiene una particularidad, respecto a la historia política chilena, que no es ni bueno ni malo (...) se crea en el marco de la segunda vuelta presidencial, entre dos coaliciones que no tenían una cultura de trabajo conjunto y más bien competido y disputado espacios".
Por tanto, el "cuajar eso, es algo que se demora y hacerlo desde el Gobierno es tremendamente complejo. Pero yo estoy convencido de que es necesario que tanto en Chile, como en el mundo, las fuerzas de izquierda y centroizquierda trabajen unidas (...) Más allá de las dificultades, de las diferencias que puedan existir, estoy empeñado que aquí pueda parir una coalición que sea de larga data en el futuro de la historia de Chile".
Ante la pregunta es si esta coalición debe agrupar también a la DC, contestó que "yo espero que esta sea una coalición que le dé estabilidad a Chile y una proyección de las ideas progresistas"
Respecto a lo más gratificantes de la primera mitad de su mandato, expresó que "de las cosas que más me han emocionado y que es permanente cuando viajamos a terreno, es el agradecimiento, cariño y reconocimiento que nos entregan familias, en particular madres por la Ley TEA(...) He sentido cómo las familias de mujeres cuidadoras se han sentido reconocidas e integradas con sus hijos". A la vez que mencionó lo hecho en materia de trenes.
Y agregó que "son proyectos de Estado, en cualquier caso acá se requiere un trabajo de continuidad entre los gobiernos pasados y los que vendrán, pero nosotros le hemos dado un nuevo énfasis".
Lo más difícil
En relación a las dificultades que ha enfrentado su administración, Boric dijo que "yo no tengo problemas ni complejos en tener que ir encausando el rumbo en función de la realidad que tenemos que vivir, ni de las percepciones, ni las críticas constructivas a lo que uno plantea (...) Hay que estar permanentemente revisando el camino recorrido y a recorrer, siempre que uno mantenga coherencia con los principios que inspiran su acción en política. Y creo que nosotros hemos mantenido coherencia en esos principios".
Con ello, precisó que "lo más duro en términos de lo que significó para el Gobierno, el Plebiscito del 4 de septiembre, donde una amplia mayoría no solamente rechazó el proyecto constitucional que propuso la primera Convenció, sino que yo siento que además fue una advertencia muy firme al Gobierno por parte de la mayoría del pueblo de Chile que no estábamos sintonizando con las prioridades que tenía la gente en ese momento".
"Fue un golpe duro, pero un golpe que en política tenemos el deber de recibir bien (...) Yo soy funcionario de los chilenos y chilenas, y tengo que saber escuchar sus críticas", sostuvo, añadiendo que desde ese momento, "la seguridad ciudadana es hoy de los temas que más tiempo dedicamos desde el gobierno, la ministra Tohá ha realizado una pega importantísimo en eso (...) tengo la convicción que esos resultados la gente los va a empezar a sentir".
Sobre si reconoce que el programa estuvo mal planteado, el Mandatario expresó que "el horizonte que planteamos en el programa sigue plenamente vigente, pero los tiempos, algunos énfasis y la construcción de mayorías políticas para poder conseguirlo, ha sido complejo y ha tenido que cambiar. Somos un Gobierno con minoría parlamentaria y no puede pretender que sus proyectos van a ser 100% como los había planteado en un comienzo".
Y acotó que los programa "no son una lista de supermercado y nosotros hemos avanzando significativamente en muchas cosas". Puso por ejemplo, la ley de 40 horas, el copago 0 en Fonasa, el salario mínimo a $500 mil pesos.
"Evidentemente las cosas han tenido que cambiar, no hemos podido hacer todo lo que nos hubiese gustado, pero es parte de la realidad de la política y yo no lo dramatizo, ni lo moralizo", recalcó.
Según el Mandatario, si bien se han ido adaptando a incluir otros temas como la seguridad entre sus prioridades, "la aspiración de una justicia social, del cuidado y respeto al medios ambiente (...) son cuestiones que siguen inspirando la acción cotidiana del Gobierno. Estamos cumpliendo dos años, lo que yo he señalado es que no hay tiempo para hacer promesas escatológicas, sino que lo que se trata es de cumplir y yo tengo la convicción de que ha cumplido, mejorando la calidad de vida de los chilenos y chilenas y que eso se va a notar cada vez más".
Esto pese a que manifestó que "nosotros recibimos un país en marzo del año 2022 que tenía muchos, muchos nudos críticos, que estaba desestabilizado, que tenía más de un 9% de inflación y que llegó a estar en el 14% (...) un país donde las las fronteras estaban absolutamente desbordadas (...) donde el conflicto en La Araucanía estaba completamente desbordado (...) Yo creo que hemos normalizado el país".
"Cuando tenemos una crisis de la magnitud que tuvimos, evidentemente que las responsabilidades no pueden atribuirse a una sola persona, ni aun solo sector, son compartidas. Pero el responsable hoy día no tiene ningún sentido que diga que son del gobierno anterior (...) Yo en eso soy autocrítico (...) siempre hay cuestiones compartidas. Nosotros recibimos un país desestabilizado y hoy tenemos una situación más normalizado", sostuvo.
Unificación del Frente Amplio
Respecto a la unificación de Convergencia Social y Revolución Democrática para llegar a un sólo partido del Frente Amplio, Boric opinó que "fue un proceso del cual yo estoy muy orgulloso, es una buena noticia para el sistema político chileno... que haya una apuesta por la unidad y coherencia de dos partidos que si bien empezaron en dos tiempos distintos, tenemos muchas más cosas comunes y tenemos muchas más cosas que nos unen que las que nos separan"
A su juicio, la idea es "apostar a la unidad y a fortalecer una herramienta política como un partido, que quizás están de capa caída en estas décadas, pero son tremendamente importantes en el nuevo funcionamiento de la democracia". A la vez que destacó la "buena participación que tuvo el proceso.
