Respaldo manifestaron voces del Congreso Nacional a la decisión anunciada hoy por el Presidente Gabriel Boric de llamar a consulta al embajador de Chile en Venezuela, Jaime Gazmuri, por las polémicas declaraciones del Canciller Yván Gil, quien negó la existencia del Tren de Aragua.
La decisión del Mandatario tiene por objeto conocer en detalle la situación del país y evaluar medidas, incluso frente a organismos internacionales, ante la falta de colaboración de Venezuela en materia de seguridad y migración.
Uno de los legisladores que destacó esta medida fue el diputado y presidente de la comisión de RR.EE de la Cámara, Tomás De Rementería (PS). "Creo que el Presidente Boric tomó una decisión que ha sido la correcta. Esto tenía que responderse energéticamente", adujo.
En ese sentido, acusó que "Venezuela se ha convertido en un problema para la seguridad de Chile, no aceptan los vuelos de repatriación, no aceptan entregar información, no firman el convenio que se comprometieron a firmar".
Ahora bien, De Rementería consideró que "el quiebre de relaciones traería solo problemas a corto plazo, creo que esto tiene que solucionarse y Venezuela mostrar una disposición a cumplir lo mínimo, porque si se llaman República Bolivariana de Venezuela, es por tener un espíritu de colaboración en las Américas que no han tenido con Chile".
Por su parte, el diputado Vlado Mirosevic (PL), afirmó que "las declaraciones del Canciller Gil son bastante preocupantes y llegan a ser hasta insultantes respecto a la realidad de violencia que hemos vivido en el norte, justamente del Tren de Aragua. Por lo tanto, me parece bien la decisión del Presidente de llamar a consulta al embajador Gazmuri".
Lo anterior, agregó, "es una manera de protestar, de decir que no estamos cómodos, que no nos da lo mismo y que no son aceptables las declaraciones del Canciller venezolano".
Si bien señaló que la decisión "es la correcta", el diputado Diego Schalper, acusó el Mandatario "llega tarde". "La veníamos planteando hace bastante tiempo a propósito del fraude electoral que se está fraguando en Venezuela, con motivo de lo que aconteció con el teniente Ojeda y se necesitó el bochorno de las declaraciones del Canciller venezolano para que reaccionaran".
En esa línea, el diputado Cristian Labbé (UDI), indicó que "valoramos que el Presidente de la República haya escuchado lo que le venimos pidiendo hace mucho tiempo atrás, de que el embajador chileno en Venezuela fuera llamado a consulta".
"Es de plena gravedad los dichos del Canciller, es de plena gravedad que el señor Monsalve haya viajado y hoy día el Gobierno y una autoridad venezolana dice que no va a firmar ese convenio y este Gobierno lamentablemente actúa tarde", criticó.
Quien también opinó sobre la definición del Mandatario fue el diputado Matías Ramírez (PC). "Me parece razonable que el Gobierno chileno haya llamado al representante de nuestro país en Caracas a objeto de informar las situaciones que están ocurriendo respecto de la coordinación en la lucha contra el crimen organizado y en ese sentido, esperamos que esto permita robustecer precisamente estas relaciones para hacer efectiva la lucha contra el crimen organizado".
Su correligionaria de la Cámara, la diputada Carmen Hertz (PC) señaló que "el llamado a consultas de un embajador es una facultad exclusiva del Presidente de la República y ante los dichos temerarios del Canciller de Venezuela de negar la existencia de la organización criminal transnacional Tren de Aragua, es una decisión absolutamente correcta".
Soto arremete contra Monsalve
Más crítico fue el diputado del PPD, Raúl Soto, quien apuntó contra el convenio de colaboración policial que firmó el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, con Venezuela.
Apuntando a la autoridad, el legislador señaló que "ese acuerdito que no ha servido para nada, que firmó con Venezuela, que lo tome, que lo rompa y lo bote a la basura, o que demuestre para qué ha servido. Hasta ahora, para nada".
"Al contrario, solo para más polémicas", añadió. "La verdad es que no hay voluntad de Venezuela de colaborar con una salida a la crisis de seguridad y migración que vive nuestro país y el continente completo, porque no se hacen cargo de que son ellos los principales responsables de lo que está ocurriendo en Chile y en el continente, y si no se hacen cargo, yo creo que hay que aumentar la presión diplomática del Gobierno de Chile y del Estado de Chile".
"Se acerca el momento en que el Gobierno tendrá que evaluar si es conveniente o no para los intereses de Chile mantener relaciones diplomáticas abiertas con un régimen que no es democrático, que es dictatorial y que además miente a Chile y miente al continente de sus delincuentes", sentenció.