"Lo realmente grave no fue únicamente que se condenara sin que existiera causalidad, sino que se me condenara por homicidio en circunstancia que, como luego indico la Corte de Apelaciones y la Corte Suprema, ni siquiera ocurrió un homicidio, vale decir, me acusaron y estuve formalizado por muchos años como presunto asesino de un expresidente e incluso en prisión preventiva, por un delito que jamás existió". Ese es un extracto de la demanda contra el Estado por "error judicial" presentada ante la Corte Suprema por uno de los absueltos en el caso por la muerte del expresidente Eduardo Frei Montalva, en 1982, luego que en agosto del año pasado la Sala Penal del máximo tribunal ratificara que no hubo homicidio, como lo determinara la Corte de Apelaciones de Santiago en 2021. Con esa sentencia, se puso fin a mas de 20 años de indagatorias, y quienes estuvieron procesados cerca de una década y fueran condenados en 2019 por el entonces juez Alejandro Madrid, hoy jubilado, acabaron recuperando su inocencia. El demandante es uno de ellos. Se trata del exagente civil de la DINE y la CNI Raúl Lillo, quien advierte en su presentación, entre otras cosas, que el fallo de primera instancia "incurrió en un grave error de hecho, lo que en caso de no haber sido doloso únicamente se puede explicar por ignorancia respecto al proceso, vale decir, de lo que consta en el expediente, y no puede ser en caso alguno justificable para un juez ( ... ) y dicho error provoco como consecuencia un sentencia injustificadamente errónea". Si bien el abogado Maximiliano Murath, que representa a Lillo, no solicita una indemnización de manera directa, en la demanda pide que, de declararse errónea la resolución del ministro Madrid, la "cuantía" se discuta en el juicio sumario correspondiente.
