"Estamos muy consternados, dolidos, no lo justificamos para nada y repudiamos el acto". Con esas palabras, el superintendente de Bomberos de Valparaíso, Juan Paredes, abordó la formalización del exvoluntario de la institución, Francisco Mondaca, y de un exbrigadista de la Conaf, Franco Pinto, sindicados como autores del megaincendio de la región, el pasado 2 de febrero.
En conversación con Radio ADN, Paredes comentó que "el que nos haya pasado esto es un golpe muy grande y que nos va costar reponernos, pero vamos a salir adelante", y acotó que "nos sentimos prácticamente humillados; el ver salir a un bombero esposado de un cuartel es la humillación más grande que puede tener un bombero de Chile en este momento".
"No justificamos en absoluto lo que hizo (Mondaca), porque es una mancha en nuestro 173 años de vida de Bomberos de Valparaíso", remarcó. Pero lo más grave, indicó, que "nadie en la prensa ha dicho que en el cuartel no se encontró absolutamente nada".
De todas formas, aseveró que Mondaca ya no es bombero "por los hechos y antecedentes que se nos hizo llegar el mismo día. Sesionamos y se acordó de forma inmediata su expulsión de la institución".
Controles en la admisión
A raíz del caso, las admisiones a Bomberos han sido suspendidas, con el fin de chequear los controles psicológicos de quienes buscan ingresar a las compañías.
Según Paredes, "hay factores que tienen que valorarse en recursos. Nosotros no tenemos recursos para contratar a psicólogos profesionales de primera instancia, tenemos que estar recurriendo a bomberos profesionales y tenemos que estar sujetos a sus tiempos profesionales".
De todos modos, aseguró que Mondaca "
sí pasó por controles psicológicos" y sí cumplía con los requisitos médicos y físicos exigidos por la institución.
"Pero aquí hay una falencia que nosotros determinamos (...) que es la fatiga disciplinaria; en algún momento tuvimos una fatiga, post pandemia, donde tuvimos a muchos postulantes y preparación vía Zoom, que no es lo mismo que personal, de la afinidad, de mirarnos a los ojos. Probablemente esto nos esté pasando la cuenta y estamos revisando todos nuestros parámetros", añadió.
De todas formas, el superintendente descartó hacer un "mea culpa" respecto a su responsabilidad en dejar ingresar a personas que eventualmente no estaban capacitadas para formar parte de la institución. "Nosotros somos muy rigurosos en base a esto, extremadamente rigurosos, pero el colador a veces tiene una fisura, y nos guste o no, tenemos que considerar que le afecta a todo organismo, aunque esté muy bien preparado", indicó.
Consultado por si podrían haber otras "fisuras" con bomberos involucrados, Paredes lo descartó completamente. "Es extremadamente difícil, hemos estado trabajando de forma muy consciente y muy profesional".
Filtros para el ingreso
Paredes indicó que los filtros de la intitución son "reservados" pero que se ejecutan por profesionales de Bomberos que utilizan sus horas de voluntariado para ejecutarlas.
"Aquí hay una malla cuyo perfil se ha ido perfeccionando en los últimos años y lo tiene la Academia Nacional, y junto con esto, lo tiene cada academia técnica de los cuerpos de Bomberos. Nosotros la tenemos, con excelentes profesionales, donde esto se va trabajando en forma cuidadosa", indicó el superintendente.
Con ese trabajo, aseguró, "se ha borrado ese término de que no hay mejor pirómano que un bombero, y lo hemos demostrado con creces. Y el tiempo nos ha dado la razón".
