El diputado Diego Ibáñez.
Aton
El diputado y presidente de Convergencia Social, Diego Ibáñez, ha sido foco de diversos cuestionamientos en las últimas horas luego de que acusara que en la oposición existe una nueva ideología, el "antigabrielismo", que se opone a todo lo que propone el Presidente del la República, Gabriel Boric.
Las críticas de sus pares han subido de tono y no han provenido sólo de la centro derecha, también del oficialismo. Por ejemplo, el diputado PPD, Raúl Soto, dijo que Ibáñez "una vez más demuestra su torpeza política de la cual ya nos ha acostumbrado, y da cuenta de que no está a la altura de liderar el partido del Presidente de la República".
Por otro lado, la ministra del Interior, Carolina Tohá, manifestó "vergüenza" por el debate político que se instaló a raíz del concepto de Ibáñez. En particular, porque cuando se le preguntó su opinión, ella estaba informando sobre un operativo policial en la Región de Atacama.
En medio de este revuelo, y tomándose de las declaraciones de Tohá, esta mañana desde el Congreso Nacional, Ibáñez volvió a hablar y si bien no reiteró el concepto de "antigabrielismo", repitió sus argumento y apunto a un "negacionismo del cambio" en la oposición.
"Lo que es una vergüenza es que aquí finalmente se de espacio a una negación de toda transformación en este Congreso. Yo quiero ser muy claro en esto. Aquí el Frente Amplio no llegó al Congreso para ser ningún testimonio de transformación. Aquí hemos hecho propuesta tras propuesta tras propuesta. La reforma de pensiones que se presentó en un inicio no es la misma que hoy día se está empujando. El Presidente Boric ha sido generoso, ha recogido la impresión en materia de 40 horas, de sueldo mínimo y esperemos también que la derecha sea generosa, pero con respuestas como de que no vamos a ceder ningún punto de solidaridad, aquí no se avanza y hacemos un llamado a la generosidad".
En esa línea, indicó que "ayer, mientras se da este debate en los medios de comunicación, con mi equipo estábamos en Quintero atendiendo a 200 niños que tenían síntomas de intoxicación, mientras los medios de comunicación perdían tiempo y páginas en una polémica en extremo pequeña, sin hablar ni siquiera de lo que pasó en Quintero el día de ayer. Yo creo que eso justamente es lo que a mí me da vergüenza".
Además, profundizó en su postura: "No hay espacio para ingenuidad. Aquí el Gobierno lo que ha presentado en materia de pensiones es propuesta tras propuesta tras propuesta y todo le han dicho que no. De hecho, es más, presentó una propuesta incluso similar al proyecto de pensiones del expresidente Piñera y le dijeron que no. La derecha le solicitó datos duros, Mario Marcel llegó con una carpeta de datos duros, la superintendencia de pensiones llegó con una carpeta de datos duros respondiendo a cada requerimiento de parlamentarios de la derecha que le dijeron a todo que no. Dijeron que no a la votación en general. Dijeron que no a la votación en particular. Y hoy día se están negando a avanzar en el Senado (…) Si eso no es negacionismo al cambio, yo no sé qué es".