Los expertos lo han dicho: el brote de influenza A está casi en su peak y la red, que está cada vez más estresada, tiene un gran desafío por delante ante una población que aún no llega a los mínimos deseados de vacunación: ayer alcanzó el 69,4% y la meta es el 85%. Esta situación ya ha generado complicaciones en el sistema y expertos ya advierten que el incremento de cupos podría no ser suficiente. Y es que aún faltan meses para que termine la temporada de frío y las camas críticas de adulto están sobrepasando el umbral de ocupación deseada, con un 92,9% de los cupos ya tomados en la red público o privada. Y el estado del sistema de salud se ve aún más tensionado debido a que, a raíz del "boom" de vacunación que se generó tras los decesos en Ñuble, hay escasez general en las vacunas de adquisición particular.