No han sido jornadas tranquilas en el oficialismo. A un día de que el Presidente Gabriel Boric rinda su tercera Cuenta Pública a la nación, tres debates han abierto notorias diferencias al interior de la alianza de Gobierno,
en un contexto que amerita, según reconocen las mismas huestes, la cohesión del sector.
Fue el reflote del proyecto relativo al Crédito con Aval del Estado (CAE) que el Gobierno comprometió a presentar no más allá de septiembre, el que partió por remover las aguas de los partidos oficialistas.
Mientras voces del Partido Comunista y el Frente Amplio exhortaron al Ejecutivo a cumplir con la condonación universal prometida en el programa de Gobierno, en el Socialismo Democrático llamaron aterrizar las expectativas económicas y a barajar otras fórmulas para plantear la deuda universitaria.
A esto ahora también se suma las divergencias sobre el término acuñado por el presidente de Convergencia Social, Diego Ibáñez, para ilustrar el obstruccionismo de la oposición: "antigabrielismo", y las tesis contrapuestas del Partido Comunista y La Moneda sobre las manifestaciones a favor del alcalde Daniel Jadue.
Jadue
"La justicia no es para transformar a las fuerzas políticas en barra". Fue la sentencia del subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, sobre la manifestaciones que figuras de PC hicieron en respaldo del edil de Recoleta, en el marco de su audiencia de formalización por los delitos de cohecho, fraude al fisco y estafa.
Así La Moneda se desmarcó del respaldo cerrado que militantes del Partido Comunista extendieron a Jadue y que también encausaron en una carta -suscrita por cerca de 1500 personas- que acusó "una estrategia de 'guerra jurídica' dirigida específicamente contra líderes políticos que aportan en el cuestionamiento y la transformación del sistema neoliberal".
Lo anterior llevó a la ministra de la Segegob, Camila Vallejo, a tomar distancia del concepto acuñado en la misiva. "Hay que defender la institucionalidad que tenemos", afirmó, llamando a "tener una mirada un poco más desde arriba".
Así todo, en el PC no cayeron bien las declaraciones de Monsalve. El presidente del Partido, Lautaro Carmona, tildó de "descalificación gratuita" los dichos del Socialista. "No me parece que corresponda a una autoridad de Gobierno", afirmó.
De esto hizo eco la diputada Alejandra Placencia, acompañada de los diputados Hernán Palma (IND), Nathalie Castillo (PC), Daniela Serrano (PC), Ana María Gazmuri (Acción Humanista) y Matías Ramírez (PC). "Son dichos inapropiados, a nosotros nos parece que el derecho a la manifestación y el derecho a la reunión es libre en un estado de derecho y por cierto me parece que es una descalificación innecesaria", sostuvo.
"Antigabrielismo"
"La derecha ha inaugurado una nueva especie de ideología: el antigabrielismo", sostuvo el timonel de Convergencia Social, Diego Ibáñez, provocando reacciones de todo el arco político.
En el Socialismo Democrático, hubieron críticas para la selección de palabra del diputado, en tanto personalizaba el debate en la figura del Presidente. En eso, el líder del PPD, Jaime Quintana, afirmó que aquella expresión "echa por tierra el liderazgo del Mandatario".
Más crítico fue el diputado Tomás de Rementería (PS) al expresar que "Diego nos tiene acostumbrados cada cierto tiempo a dar declaraciones bastante desafortunadas y ridículas. Me parece que no tiene ni un sentido hablar de que hay una ideología antigabrielista".
El concepto de Ibáñez no había rebotado en La Moneda hasta que fue requerida por él la ministra del Interior, Carolina Tohá. "La verdad creo que es tan anecdótico ese tema. Lo que está pasando aquí es tan importante. La política discutiendo esas cosas a mí a veces me da un poco de vergüenza, prefiero dedicarme a esto que importa", señaló la jefa de gabinete, en una pauta policial en Pozo Almonte, en la Región de Tarapacá.
En el Congreso Nacional, la secretaria de Estado tuvo la oportunidad de profundizar en sus dichos. "Creo que tenemos que aprender a llevar las polémicas del mundo político en el lugar que corresponde y como corresponde. Porque en torno a esta polémica se ha hecho toda una discusión en torno a la palabra, sin tocar nunca el tema de fondo, que es donde nos debiéramos concentrar", adujo.
Y agregó: "En general, en la política prende mucho irse por la cosa puntual y armar una gran polvareda que saca muchos titulares y cuñas, pero que aporta poco al debate".
Apuntando especificamente a la palabra "antigabrielismo" Tohá señaló que "es un término, creo que no es relevante, es una palabra para reflejar una idea, pero que no es lo relevante, lo relevante es el fondo del asunto".
