Este sábado, se llevó a cabo la audiencia de control de detención de cinco individuos acusados del secuestro de una mujer en Talagante. Durante la audiencia, se decidió ampliar el arresto de los acusados.
En relación a este caso, el fiscal del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), Sergio Soto, proporcionó detalles sobre las diligencias de investigación que condujeron a la captura de los cinco sujetos.
"Sabemos con bastante certeza que estos individuos
formaban parte de una organización de carácter internacional, compuesta por personas de nacionalidad venezolana, puertorriqueña y colombiana, que se dedicaban al secuestro en nuestro país", explicó el fiscal Soto.
Además, se señaló que los delitos eran coordinados y dirigidos desde el extranjero por ciudadanos venezolanos. Por esta razón, se están llevando a cabo las diligencias necesarias para identificar a otros individuos que podrían estar involucrados en este y otros delitos cometidos en Chile.
En cuanto al delito imputado a los cinco hombres detenidos, se trata del secuestro de una mujer que fue llevada a un lugar de cautiverio en Talagante, donde fue constantemente amenazada con armas de fuego o con torturas si su marido no pagaba el rescate exigido.
"Es importante tener en cuenta que esta persona estuvo privada de su libertad durante casi tres días, lo cual obviamente tuvo un impacto significativo en ella", explicó Soto.
Se sabe que el objetivo de los acusados era secuestrar a la víctima y exigir dinero a sus familiares a cambio de su liberación. Fue la pareja de la mujer quien denunció los hechos, ya que se encontraba fuera de la Región Metropolitana.
El fiscal Soto afirmó que los cinco individuos se encuentran en "una situación irregular, lo que en última instancia nos impide determinar cuándo ingresaron a nuestro país".
Aunque actualmente están siendo formalizados por este caso, no se descarta que los hombres puedan estar vinculados a un incidente anterior, en el cual una mujer está imputada por un secuestro con homicidio registrado en Talagante.
"La vinculación más concreta entre los dos casos surge de la revisión de los teléfonos celulares, donde los acusados hablan precisamente de este episodio de la semana pasada", explicó el fiscal Soto.