Lagos, riberas de ríos, olas congeladas o bahías, como la de Porvenir, en la Isla Grande de Tierra del Fuego, en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, cubiertas de hielo se han repetido por estos días en la Patagonia, dejando hermosas postales que probablemente desaparecerán en algunos días o semanas. La principal afectación ha sido hasta ahora el suministro de agua potable, señala José Ruiz, delegado presidencial de Magallanes, e incluso abastecer con puestos de agua potable ha sido complejo porque en la calle se congelaban, dice la autoridad. Otra dificultad ha sido el hielo sobre las calzadas y el funcionamiento del transporte público, que está al 60% de su capacidad, por lo que para descomprimir la presión sobre la ciudad suspendieron clases inicialmente en Punta Arenas, medida que ya se extiende a seis de las diez comunas de la región.