han estado marcadas por un intenso debate en el Parlamento en torno a la propuesta de dos días para sufragar -26 y 27 de ese mes- y la multa al voto obligatorio. El martes, el Senado rechazó -votos oficialistas- ambas modificaciones, mientras que el Gobierno anunció que presentará un veto para reponer la multa.
Se trata de una carrera contra el tiempo, ya que sólo podrán hacerlo luego de la semana distrital, el 22 de julio, mientras que las inscripciones de las candidaturas son la última semana de este mes. "La ley debería ser promulgada con posterioridad a la inscripción de las candidaturas, pero con un tiempo lo suficientemente distante de las elecciones para que se pueda aplicar", explicó el
ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde al respecto.
El veto, a parte de la multa, buscará reemplazar el concepto "ciudadanos" por lo que actualmente se señala como "electores", definición que no cayó bien en la oposición, puesto que el concepto ciudadano deja fuera a los extranjeros residentes, y por lo tanto, podrían votar, pero sin multa, a diferencia del resto de los chilenos.
El debate ha abierto otras iniciativas, como la de los diputados PS, Manouchehri, Daniela Cicardini y Daniel Melo, quienes plantean suprimir el derecho a votos de extranjeros avencidados en Chile para las elecciones parlamentarias y presidenciales. Esto, bajo el argumento de que los extranjeros residentes que quieran participar de las elecciones tendrán la alternativa de acceder a la nacionalidad y hacerse ciudadano, para así demostrar un "compromiso permanente y lealtad por Chile".
Sobre este debate, el analista electoral de la U. de Talca, Mauricio Morales, comenta que "el voto obligatorio sin multa, que en la práctica es un voto voluntario, evidentemente va a beneficiar a los incumbentes, ya sean éstos de Gobierno o de oposición".
"Pero como los partidos de gobierno hoy día tienen 150 alcaldes, claramente los mayormente beneficiados van a ser los incumbentes del oficialismo. Esto ocurre, porque los alcaldes incumbentes movilizan electores y si es que vota poca gente, esa movilización electoral va a ser mucho más efectiva".
Pero además, toda esta trama legislativa vuelve a poner el foco en el peso del voto extranjero en el país, donde la balanza se inclinará en torno a la distribución territorial, la que de acuerdo a los expertos, es "extremadamente desigual". Algunos, en tanto, plantean que la población de nacionalidad venezolana, habilitada para votar, podría tener "menor disposición" a votar por candidatos de izquierda, pero otros creen que con la arremetida en seguridad de la oposición, los votos podrían ir al oficialismo.
Datos del padrón y extranjeros
Tomando como base el padrón electoral del plebiscito del 17 de diciembre de diciembre de 2023, y las proyecciones de aumento que éste pudo tener de cara a las municipales -el cierre será 60 días antes de los comicios, de acuerdo a la normativa- hay varias direcciones de análisis. Por entonces, habían 15,4 millones de personas en el padrón, de la cuales 676.028 eran extranjeros habilitados para sufragar, es decir, el 4,4%.
De acuerdo a cifras el Servicio Electoral (Servel), la población migrante estaba votando a tasas promedio de 20% con voto voluntario, lo que aumentó al triple (60%) con el voto obligatorio.
Al mirar por comuna, por ejemplo, la de Santiago, una de cada tres personas que concurran a votar podrían ser extranjeras; según el padrón del Plebiscito, el 28,7% (104.693) de los extranjeros están habilitados para votar en esa comuna para las elecciones de octubre, mientras en que Independencia, este porcentaje llegaba al 29% (25.568); y en Estación Central, un 17,4% (22.008).
En el norte, en tanto, al ser una de las zonas que concentra mayor población migrante, también se agrupa el mayor número de extranjeros con derecho a votar. Por ejemplo, en Iquique, la cifra llegó a 15,8% (26.001); en San Pedro de Atacama también fue un 15,8% (1.240); y en Mejillones, 15,7% (1.629).
Lo anterior significa que este perfil de votante podría ser clave en algunas comunas que concentran población inmigrante, y su voto podría incidir de manera relevante.
¿Hacia dónde iría el voto extranjero?
El analista político de la U. Central, Marco Moreno, comenta que "lo que sabemos es que entre los electores extranjeros los migrantes venezolanos (que son los mayoritarios) podrían tener una menor disposición a votar por candidatos de izquierda ya que salen de Venezuela como resultado de la gestión de gobiernos de izquierda (Chávez y Maduro)".
"El voto obligatorio sin multa (o voluntario en la práctica) podría favorecer más al oficialismo, porque la derecha ha sabido conectar bien con la principal urgencia que tienen los chilenos que es la seguridad. Además, se ha estudiado de que la derecha en el mundo suele arrastrar un voto de 'enojo' que no es necesariamente de identificación con el sector".
Andrés Rosenberg, analista político UNAB
El experto recuerda además que según el padrón electoral de julio de 2022 eran cerca de 500 mil los electores extranjeros aunque podría acercarse a los 800 mil en la actualidad. "Estos se concentran en comunas como Santiago, independencia y Estación Central donde podría inclinar en uno u otro sentido de la balanza (en la lógica oficialísimo vs oposición) el resultado de la elección", agrega.
Una idea distinta tiene el analista político de la Universidad Andrés Bello, Andrés Rosenberg. De acuerdo al experto, "es muy difícil hacer una predicción seria cuando el voto es voluntario, pero si consideramos las últimas tendencias electorales, el voto obligatorio sin multa (o voluntario en la práctica) podría favorecer más al oficialismo".
Esto, "porque la derecha ha sabido conectar bien con la principal urgencia que tienen los chilenos que es la seguridad. Además, se ha estudiado de que la derecha en el mundo suele arrastrar un voto de 'enojo' que no es necesariamente de identificación con el sector", sostiene.
En base a los datos del plebiscito de 2023, comenta por su parte, Mauricio Morales, que de ese 4,4% que representa la población extranjera habilitada para votar, destaca que hay una "distribución extremadamente desigual", si se compara, por ejemplo, lo lo que ocurre en Santiago versus Iquique. "En consecuencia, en esas comunas, el voto migrante podría ser decisivo a la hora de contar los votos y muy incidente al momento de decretar o declarar ganadores y perdedores".