Para implementar el tratado de libre comercio entre Chile y Paraguay que entró en vigor el pasado 14 de febrero, y para avanzar en el Corredor Bioceánico Vial, que une a ambos países con Brasil y Argentina,
es que el Presidente Gabriel Boric realizó su primera visita oficial a dicho país.
Esta es la segunda vez que el Mandatario arriba a Asunción. Antes concurrió al cambio de mando presidencial en el que asumió Santiago Peña, líder del Partido Colorado, histórica tienda política conversadora de Paraguay que se ha mantenido en el poder por más de 70 años.
Pese a ser de signos políticos distintos, Boric y Peña sintonizan. Ambos son políticos jóvenes, pese a que el Mandatario paraguayo supera al chileno en edad. En el impulso de una agenda comercial entre Chile y Paraguay, los Presidentes han hecho patente su simpatía.
En conversación con El Mercurio, Peña dio cuenta de los motivos por los que eligió Chile como primer destino internacional tras haber asumido la presidencia, con lo que apuntó a la estabilidad macroeconómica y la apertura a los mercados. Asimismo, consideró que Boric y él son figuras que contribuyen a no polarizar la región.
"En los papeles nos pueden ver como Presidentes de signos o ideologías diferentes, pero estoy seguro que tenemos enormes coincidencias y yo soy de una votación integradora y de una visión de mucho respeto a las elecciones que hace cada uno de los pueblos", sostuvo, para luego indicar que en los comicios de Venezuela, "si no hay garantías electorales, voy a ser el primer en levantar la voz, como seguro lo va a hacer el Presidente Boric".
En el encuentro empresarial Chile-Paraguay que tuvo lugar esta mañana en Asunción, el Presidente chileno ratificó esta cercanía.
En su alocución, hizo hincapié en "la compenetración que hemos podido tener como dos Presidentes jóvenes, que quizás cuando se mira desde el prejuicio, se podría haber dicho que teníamos visiones políticas opuestas, y en donde nosotros hemos decidido dejar de lado cualquier diferencia para trabajar conjunto de manera concreta por la integración en nuestra región".
"Todas las conversaciones que tenemos, que no han sido pocas, vienen en esa línea y creo que hoy día estamos cumpliendo con esa ambición", agregó.
Distancia con líderes progresistas
Con todo, el acercamiento de Boric con Peña contrasta con la distancia que ha ido adquiriendo con otros líderes progresistas de la región, particularmente con el Presidente de Colombia, Gustavo Petro, cuyas críticas al sistema judicial chileno en su respaldo al alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, motivó la presentación de una carta de protesta de Chile.
Otro caso es el Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, con quien Boric ha tenido diferencias públicas en el pasado sobre el régimen de Nicolás Maduro y la condena a Rusia por la invasión sobre Ucrania. La visita oficial que haría a Chile en mayo, y que radicaba en una oportunidad para estrechar relaciones, Lula la suspendió a causa de las inundaciones que afectó al sur de Brasil.
En este contexto, en el Ejecutivo indican que la cercanía de Boric con Peña nace del pragmatismo con el que Chile orienta sus relaciones exteriores, el que prima sobre la ideología de los gobernantes de turno. En este caso, ambos impulsan el fortalecimiento de las relaciones comerciales entre Chile y Paraguay. En tanto, se atribuye la última diferencia de Chile con Petro al estilo particular del Mandatario colombiano.
Del mismo modo, tal como ilustra Peña, las elecciones de Venezuela, es un asunto que concita preocupación y expectación en el Ejecutivo. En el caso que logre imponerse Edmundo Gómez -competencia de Maduro- avizoran "una transición compleja" de Venezuela, en el que se cree que Chile puede acompañar por la propia experiencia del país en ese tipo de procesos.
