"Esto es la ley de la selva". Así describe Guillermo Purcell (64 años) lo que sufre como peatón cuando transita por las calles de Las Condes debido a las infracciones cometidas por los usuarios de scooters, según denuncia. La alta velocidad, el no respetar señaléticas o el dejarlo estacionado en cualquier parte después de utilizarlo, son todos problemas que hoy impactan la convivencia vial en Chile. Y es que en los últimos seis años el uso de este medio de transporte se ha popularizado en todo el país, ya sea mediante su arriendo por pequeños tramos con alguna de las empresas que ofrecen este servicio o por la compra de uno personal. "Para nosotros los adultos es un riesgo terrible. A mí la semana pasada me pasaron a llevar el codo, casi atropellaron a mi perro, lo dejan estacionado en cualquier vereda. No hay una responsabilidad ni un miramiento hacia el peatón", lamenta Purcell. La misma experiencia tiene Verónica Hoch, quien cuenta se "salvó" de ser atropellada por un scooter al salir de su edificio en la calle Navidad con Kennedy Lateral, comuna de Vitacura.