Senador y presidente del PPD, Jaime Quintana; presidente del PC, Lautaro Carmona.
Emol.
Una fractura abrió el
PPD en la alianza de Gobierno, luego de los dichos del
presidente de la tienda, senador Jaime Quintana, lo que vino a agudizar la tensión que se venía arrastrando en torno a la postura del PC con Venezuela, especialmente tras las elecciones de ese país, el 29 de julio.
Las primeras muestras de molestias surgieron a raíz de que el PC saliera a reconocer los resultados de la elección que habrían dado "el triunfo" a Nicolás Maduro, cuando el Presidente Gabriel Boric -y varios países de la región- anunciaron que se debían revelar las actas de votación, lo que hasta la fecha no ha ocurrido.
El senador PPD, Ricardo Lagos Weber fue uno de los primeros en marcar una distancia que tomó ribetes morales sobre lo que se entiende por democracia. Dijo no querer estar en una coalición "con alguien que cree que lo de Maduro está bien hecho", y que la postura del PC, "no se condice con ningún estándar democrático".
Tal fue la tensión, que escaló incluso a los ministros, con declaraciones cruzadas entre el titular de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, y su par del Trabajo, Jeannette Jara. El PC, en tanto, poco calmó las aguas, al acusar a los ministros de "activismo".
El domingo, Quintana, reavivó la polémica y fue un paso más allá: "Si en un plazo prudente el PC no cambia su posición sobre Venezuela, veo muy difícil renovar un pacto con ellos. Sería muy lamentable que por la porfía de seguir siendo obsecuentes con Maduro se ponga en riesgo la continuidad de estos pactos", dijo a La Tercera.
Frente a ello, Carmona respondió el domingo en entrevista con Radio Nuevo Mundo, que "no vamos a renunciar a nuestra posición de Partido Comunista", junto con enfatizar que continuarán en el Gobierno y que "todos compartimos que la gran batalla de la batallas es impedir el avance de las posiciones de la derecha, sobre todo de la ultraderecha, y eso se impide ganado voluntades, ganado conciencia, construyendo mayorías y en ese plano todos aportamos".
En tanto, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo (PC) y la ministra del Interior, Carolina Tohá (PPD), optaron por desdramatizar la situación, apuntando a que las complejidades al interior del bloque "no se resuelven por la prensa" y que "esos debates se dan en los lugares que corresponden".
En conversación con Emol, expertos desglosan el impacto que puede tener la advertencia del PPD en la coalición, pero también sobre los votantes de cara a las municipales y, de acuerdo a esos resultados, cómo se proyecta el trayecto a la presidencial.
Tensión en militantes en la campaña
A juicio de Raúl Burgos, director ejecutivo del Observatorio Historia y Política PUCV, las declaraciones de Quintana tensionan la relación política entre el PC y el socialismo democrático.
"Esto, más que confundir a los electores, puede generar un conflicto entre los militantes de ambas fuerzas políticas en el desarrollo mismo de las campañas. Sobre todo pensando en la elección de alcaldes y gobernadores regionales, en donde las fuerzas del oficialismo van juntos. Entonces puede ocurrir que en ciertos lugares haya dificultades para aglutinar a la militancia y adherentes", precisa.
Añade que "las declaraciones de Quintana pueden desalentar a quienes son independientes y proclives al Socialismo Democrático a que voten por las candidaturas del PC, ya que el tema de Venezuela ha tenido un impacto real en la configuración de la cultura política nacional".
Por su parte, Eric Latorre, director del magíster de gobierno y administración pública la U. Autónoma contextualiza en que el PC hoy tiene "más poder en la coalición de los votos que realmente tiene, con una votación histórica del 7% y llegó al 9% en la elección de los constituyentes; entonces, tenemos una coalición desbalanceada respecto al peso político real de cada parte".
"Lo que hace el PPD hay que leerlo como la búsqueda de un rebalance de la coalición, pero no necesariamente de fractura, todos se necesitan. Las municipales van a ser un elemento importante, que van a hablar de cuánto pesa cada partido. Aquí se está anticipando un debate, que también será muy importante en torno a la elección presidencial, y eso moverá los ejes de la discusión", precisa.
Sobre el comportamiento de los votantes, a juicio de Latorre podría ser que este contexto los "desoriente", pero enfatiza en que de todas formas, la elección municipal "es muy local, puede haber un efecto, pero no tan importante. El mayor efecto lo veo en cómo se reconfigure en la elección presidencial y en la parlamentaria".
Guillermo Holzmann, analista político, comenta que el tema de Venezuela, está instalado en la política internacional y también en Chile, "y en ese sentido, la posición del Partido Comunista no pasa desapercibido para un sector importante de la población que observa con bastante preocupación la incoherencia del PC en torno a defensa de democracia, derechos humanos y procesos democráticos transparentes, y lo que más impacta es que hay un discurso distinto entre la postura del Presidente Gabriel Boric y el PC".
"De ahí que la declaración del PPD, en términos de plantear una distancia con el PC, no pasa desapercibida y sin dudas va a tener un impacto electoral. Creo que el PPD está apostando por una posición más dura, y presionar tanto al Presidente Boric, al PC y al oficialismo-Frente Amplio, para avanzar en afianzar un acercamiento con vistas a una alianza, entre el Socialismo Democrático y el Frente Amplio, dejando de lado al PC, que desde su posición de minoría electoral, ha intentado instalarse como el articulador estratégico del Frente Amplio".
A su juicio, este proceso va a tener un "impacto negativo para el PC, el PPD apuesta que eso se va a traducir en un aumento de votación en las municipales y eso sería parte de un proceso más amplio para dejar al PC fuera en una próxima batalla electoral y quitarle la hegemonía que ha ido mostrando dentro del oficialismo".