Ha pasado un año desde que, el 23 de agosto de 2023, intensas lluvias colapsaran el colector Reñaca Norte. El violento flujo de agua que descendió por el suelo arenoso de la duna excavó un socavón de 60 m de profundidad a 10 m del edificio Kandinsky, lo que obligó a evacuar a 34 familias ocupantes. El colapso posterior de un precario colector de emergencia habilitado por el MOP, ante nuevas lluvias posteriores, causó un segundo hundimiento, lo que también llevó a declarar inhabitables las torres Miramar y Santorini Norte. Ya en junio último, otro socavón, más al sur en la duna, calle Las Petras, también obligó a evacuar y declarar inhabitable el Euromarina 2. Pero mientras en abril ya regresaron a sus departamentos las 16 familias desalojadas en el Santorini Norte y la expectativa de cerca de 60 grupos familiares del condominio Miramar es que el retorno se concrete antes de fin de año, los residentes del Kandinsky, los primeros en ser evacuados a raíz de los socavones 1 y 2, serán los últimos en volver a sus hogares, según lo que -dicen- les ha informado la autoridad.
