El lunes sesionaron nuevamente las comisiones investigadoras por las terapias hormonales para menores de edad en proceso de transición de género en Chile. En la Cámara, expuso la directora la directora del ISP, Catterina Ferreccio Readi, mientras que en el Senado, lo hizo la subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli.
Las instancias se vienen desarrollando desde julio, y buscan revisar el Programa de Acompañamiento a la Identidad de Género de niños, niñas y adolescentes (PAIG), y el Programa de Salud Trans -destinado a mayores de 18 años-, luego que se conociera el lapidario informe Cass, que abrió el debate sobre los tratamientos hormonales que se aplican.
De acuerdo a la pediatra independiente Hilary Cass, los tratamientos en niños diagnosticados con disforia de género se aplican con evidencia poco sólida, con estudios de mala calidad y con efectos secundarios. Fue aquello lo que alertó a las autoridades en Chile, quienes salieron a pedir al Minsal que explique cómo está funcionando este programa en el país.
Uno de los últimos debates ha estado centrado en la edad de los niños que pueden acceder al tratamiento. Si bien ni la ley ni el reglamento instauran una edad mínima, la subsecretaria planteó que "la única edad mínima que está contemplada es la de los documentos orientadores del programa específico que se refiere desde los tres años, pero la ley incluso no implica un límite como ese".
"La única edad mínima que está contemplada es la de los documentos orientadores del programa específico que se refiere desde los tres años pero la ley incluso no implica un límite como ese", añadió.
Sesión en la Cámara
En la sesión de la comisión investigadora que se desarrolló el mismo lunes en la Cámara, la directora del ISP, Catterina Ferreccio Readi, señaló que el Minsal no mantiene programas ni guías sobre cirugías o terapia hormonal en niñez con disforia de género o género no conforme, mientras que el programa de acompañamiento no incluye tratamiento hormonal ni cirugías.
El PAIG, que está vigente por reglamento aprobado el 26 de agosto de 2019, no ha sufrido modificaciones a la fecha, y tiene como objetivo, explicó, ser "preventivo del suicidio y enfermedad mental", además de garantizar "el derecho a la identidad de género de las personas", con apoyo al niño, niña y adolescente y a su familia.
Además, profundizó que acceso al programa es voluntario, la voluntad del niño queda informada a un representante legal -según su edad-, pero no se necesita consentimiento de dicho representante legal, es decir, prima la voluntad del niño. Eso sí, se incentiva la participación de una persona adulta de su familia en el programa.
Ferrecio explicó respecto a la administración de los medicamentos, que en general, "no hay un control sobre la práctica libre, y son acuerdos entre privados lo que el médico le explica al paciente. Sólo hay en los Servicios de Salud un comité de malas prácticas, pero no se controla lo que el médico decide para su paciente, y hay muchos ejemplos en que después que se aprobó un medicamento, en la práctica se ve que sirve para otras cosas".
Por su parte, Patricia Carmona, jefa de registro de la Agencia Nacional de Medicamentos del ISP, comentó que son tres los medicamentos liberadores de la gonadotropina que se han identificado para su uso, "autorizados para detener la pubertad precoz. Estos medicamentos están aprobados en menores de 8 años para niñas y 10 años para niños, se usa como bloqueador puberal en la disforia de género, tiene efectos adversos como todas las hormonas, como aumento pasajero de la testosterona en las primeras semanas, reducción de la densidad ósea -por eso se administra calcio-, eventos cardiovasculares, cambios del humor, aumento de riesgo de diabetes", entre otras.
También se utiliza estradiol, testosterona y progesterona, dijo Carmona, según sea el caso.
Parlamentarios cuestionan plan "derivado" de la ley
En conversación con Emol, parlamentarios participantes de las instancias en la Cámara y el Senado, expresaron sus dudas y preocupaciones en torno a los planteamientos de la subsecretaria y del ISP. Uno de los argumentos que más se
El senador Matías Walker (Demócratas), subrayó que "yo voté a favor de la Ley de Identidad de Género. Esa fue una ley que lo que estableció es el denominado cambio de sexo registral. Vale decir, el cambio de nombre de acuerdo a la identidad de género. Es una ley que no dice relación ni con las terapias hormonales ni con cambios de sexo del punto de vista quirúrgico".
"Cuando la propia ley de identidad de género habla de apoyo psicosocial en el caso de los menores de edad, en ningún caso, a mi juicio, permite los tratamientos hormonales de menores de edad sin consentimiento de los representantes legales".
Senador Matías Walker (Demócratas)
"Cuando la propia ley de identidad de género habla de apoyo psicosocial en el caso de los menores de edad, en ningún caso, a mi juicio, permite los tratamientos hormonales de menores de edad sin consentimiento de los representantes legales. Y en eso hay que tener mucho cuidado, y es lo que le dijimos a la subsecretaria el lunes en la Comisión de Infancia, Adolescencia y de Familia, porque los órganos del Estado estamos regidos por el principio de la calidad y solo se puede hacer lo que expresamente autoriza la ley", subrayó.
Por su parte, el diputado Stephan Schubert (Republicanos), calificó como "muy preocupante lo que ocurre en nuestro país con los medicamentos y en particular con estas hormonas". "Según nos señaló el ISP y también Cenabast, ellos autorizan medicamentos para un fin, pero luego los médicos pueden darle uso distinto y eso no tiene control ni registro. Además Cenabast simplemente compra, no tiene un registro, no sabe en qué se utiliza", acotó.
El parlamentario también afirmó que consultó qué ocurriría en el caso de robo de estos productos, "y efectivamente señalaron que los controles lo hacen los propios establecimientos hospitalarios y no Cenabast. Los hospitales también hacen compra directa a Cenabast, entonces puede ser también que las hormonas sean compradas directamente por los hospitales, como se cree que está ocurriendo. Por lo tanto, no hay un control de este programa".
Asimismo, el diputado cuestionó que "falta información y transparencia", puesto que "aquí se están fundando en una sola ley, que es la ley de identidad de género, que lo único que buscaba era cambiar el registro de la partida de nacimiento en cuanto a nombre y sexo. Nada más. Y desde los 14 años. Pero de ahí se deriva este programa preocupante, sin haber pasado por el Congreso, que lo hace desde los tres años, a pesar de que en otros países tampoco se hace de los tres años, se hace con terapias psicológicas, con análisis", zanjó.
El lunes, la senadora Loreto Carvajal (PPD) también manifestó su disconformidad con lo abordado en la comisión. "Me quedo absolutamente más preocupada que antes, porque siento que ese vacío (legal) nos lleva a que incluso cualquiera que representa a un menor pueda determinar su vida y su sexo, y creo que eso no es lo que queremos para nuestros niños y niñas".
"Los tratamientos hormonales son recetados por médicos"
Consultada por este tema, la diputada Emilia Schneider (FA), quien también estuvo presente en la comisión investigadora en la Cámara, salió a rebatir los argumentos de sus colegas.
La parlamentaria subrayó que "no existe ningún plan o programa del Minsal en torno a la entrega de bloqueadores de pubertad o terapias hormonales para menores de edad. Eso es falso. Existen guías en torno al tratamiento de personas trans, pero los tratamientos hormonales son recetados por médicos en el marco del ejercicio libre de la profesión médica", afirmó.
"No existe ningún plan o programa del Minsal en torno a la entrega de bloqueadores de pubertad o terapias hormonales para menores de edad. Eso es falso. Existen guías en torno al tratamiento de personas trans, pero los tratamientos hormonales son recetados por médicos en el marco del ejercicio libre de la profesión médica".
Emilia Schneider, diputada FA
"Lo que sí existe, y tiene su fundamento legal expreso en la Ley de Identidad de Género es el Programa de Acompañamiento, más conocido como Crecer con Orgullo. Este se trata de un programa de acompañamiento psicosocial para niños, niñas y jóvenes trans junto a sus familias", acotó.
En esa línea, la diputada subrayó que "el reglamento de dicho programa viene del gobierno de Piñera, así que espero la derecha no lo desconozca ni pretenda retroceder en nuestros derechos".
"Respecto a los tratamientos hormonales, por cierto, creo que hace falta un lineamiento técnico y un programa que regule una situación que actualmente no está regulada, tomando en cuenta la evidencia científica y guías internacionales respecto a salud trans, y en ello se encuentra trabajando el Minsal", zanjó.