Referencial. Sitio del suceso de uno de los asesinatos.
Fiscalía
Dos conclusiones disímiles ha emitido el Ministerio del Interior en torno a las dinámicas y móviles de los homicidios ocurridos durante las Fiestas Patrias "XL", que concretó seis días de celebración.
Entre el 16 y el 23 de septiembre pasado se produjo un total de 37 fallecidos por homicidios, según informó el Gobierno el lunes.
Una de las versiones de la cartera es que los ilícitos se produjeron -en general- con el uso de arma blanca, mientras que la segunda explicación alude a la utilización de armas de fuego para cometer los asesinatos.
El subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, sostuvo durante la presentación de la cifra de homicidios perpetrados durante la festividad que "gran parte" de los asesinatos a nivel nacional estuvieron marcados por "el uso de armas de fuego" y "por un contexto de criminalidad y drogas".
En contraste, el ministro (s) del Interior, Manuel Monsalve, sostuvo en conversación con Radio T13 que durante esta fiesta el alza de crímenes se produjo "en el contexto de riñas interpersonales, en el contexto de uso de arma blanca y también por un aumento de los homicidios lamentablemente por violencia intrafamiliar (VIF)". Descartando así que "el aumento de homicidios no se justifica por delitos asociados a crímenes organizados".
En ese sentido, señaló que de los 31 crímenes, 10 fueron riñas interpersonales, mientras cinco fueron por VIF. "Debo decir que la mitad de esos homicidios se cometieron por armas blancas", dijo agregando que ello es "completamente distinto a lo que ocurre el resto de los meses del año".
Esto, según explicó Monsalve, ya que "el resto del año, prácticamente la mitad de los homicidios se cometen con armas de fuego (...) en las Fiestas Patrias ese no fue el fenómeno: la mitad de los homicidios se cometen con armas blancas".
Esta contradicción se suma a polémica que involucró a la titular de la cartera, Carolina Tohá, quien fue acusada de "normalizar" estas muertes al señalar el pasado sábado que "la cantidad de víctimas de homicidios de estos días ha sido más o menos similar a la que hay en días habituales".
Sin embargo, ayer, Tohá, en su calidad de vicepresidenta, enfatizó que "que ese día, cuando se hicieron esas declaraciones, yo puse especial énfasis para evitar efectivamente que el hablar de datos o de números se tradujera en una despersonalización o en una normalización".
Agregó que "pero si así y todo se entendió esto como una normalización, yo quiero decir claramente que hay que esforzarnos más para ser aún más categóricas, porque jamás vamos a aceptar como una normalización homicidios y pérdidas de vidas, jamás".
