A sólo minutos de conocerse la salida de Ricardo Yáñez como general director de Carabineros con miras a su formalización el próximo 1 de octubre, el Ejecutivo nombró a su reemplazante: Marcelo Araya Zapata.
El ex general subdirector asume en un complejo momento para la institución, donde deberá hacer frente a una serie de desafíos marcados por la crisis de seguridad que atraviesa el país y el proceso de modernización que viven las fuerzas de orden y seguridad.
Justamente son el crimen organizado y los hechos de violencia los principales retos que tendrá Araya al mando de Carabineros, panorama que desde hace años viene azotando a Chile.
El alza de los homicidios, el aumento de los delitos de alta connotación social y el uso constante de armas de fuego en hechos criminales son parte de las tareas a las que Araya deberá ponerle especial énfasis para abordar la crisis que vive el país.
En ese contexto, la ministra del Interior, Carolina Tohá, adelantó ayer que "hay un mismo norte, que es preservar una institución que es importante para los chilenos, y preservarla de tal manera que esté en las mejores condiciones de cumplir con eso que las personas todos los días nos piden".
"Hay que tener una institución fortalecida, con todas las herramientas para abordar el enorme desafío de la seguridad", enfatizó.
Continuidad y "criterio Tohá"
Pero eso no es todo. Araya también deberá enfocarse en dar continuidad a la gestión que estaba llevando a cabo Yáñez, labor altamente valorada tanto por las autoridades como por el mundo político.
Lo anterior, ya que Yáñez reactivó la imagen positiva de Carabineros frente a la opinión pública, tras superar la negativa evaluación que quedó después del estallido social.
En ese sentido, Araya deberá reafirmar la posición de Carabineros como la principal fuerza de orden encargada de velar por la seguridad y de enfrentarse al crimen organizado.
Junto con esto, tendrá la misión de seguir con el proceso de modernización de la institución, el cual comenzó bajo el mando de Yáñez.
La idea es dotar a Carabineros de una nueva logística, equipamiento y legislación a fin de que los funcionarios tengan mayor protección a la hora de hacerle frente a la delincuencia.
Y asimismo, se espera que Araya dé continuidad a la institución sin "temor" a también tener que enfrentar el denominado "criterio Tohá", que establece la renuncia de alguna autoridad que vaya a enfrentar una formalización.
"La institución sigue avanzando, la institución no se paraliza, la institución en ningún momento ha dejado de realizar el trabajo que le corresponde", dijo al respecto Araya, tras ser presentado en La Moneda como nuevo general director.
"Es una institución madura y estos traspasos dan cuenta precisamente del estado en el cual se encuentra. Por lo tanto, la institución va a seguir, los carabineros vamos a seguir trabajando, vamos a seguir desarrollando nuestros servicios y esto también es señal absoluta de continuidad y de tranquilidad. Los carabineros deben estar orgullosos de este traspaso", acotó.