El Juzgado de Garantía de La Calera decretó este martes prisión preventiva para dos adultos, identificados como J.A.A.V. y K.J.F.C., que fueron formalizados por el crimen de una menor de dos años ocurrido el pasado 28 de septiembre en la Villa José Miguel.
Los imputados corresponden al padre y la madrastra de la víctima. La Fiscalía local los acusa por los cargos de parricidio y homicidio calificado, respectivamente.
En la audiencia, el magistrado Roberto Lizana Mora acogió la solicitud del Ministerio Público y decretó la medida cautelar más gravosa para ambos imputados, respecto de quienes
el tribunal dio por acreditada la participación culpable en la muerte de la niña producto de múltiples lesiones de gravedad, siendo un traumatismo encefalocraneano la causa basal del deceso.
"Evidentemente por los crímenes que se están atribuyendo, el bien jurídico que se lesionó, la clara indefensión e que estuvo la victima por largo tiempo, el contexto en que ocurrieron los hechos, las lesiones provocadas a la niña que pudieron ser advertidas por el tribunal y que presentaba en gran parte de su cuerpo, hacen pensar que efectivamente la conducta de los imputados podría reiterarse en el medio libre y en consecuencia es razonable pensar que la libertad de ambos imputados constituye peligro para la seguridad de la sociedad", indicó el juez.
En la instancia, la Fiscalía exhibió los peritajes, las fotografías y testimonios que daban cuenta de una violencia crónica en contra de la menor.
"Existen datos de atención de urgencia desde agosto del presente año que dan cuenta de que la niña habría sido llevada y se le habrían constatado lesiones previamente, que se cuenta también con declaraciones de los abuelos de la niña quienes renunciaron a su derecho a guardar silencio que refirieron que la niña presentaba lesiones que según su padre respondían a caídas. El Ministerio Público cuenta también con declaraciones de una vecina de la imputada que la habría visto saliendo de su departamento con la niña en sus brazos, tapada, vio un bulto, lo que coincide con el lugar y la hora de los hechos", indicó la fiscal Javiera Beltrán.
El magistrado agregó: "Se da cuenta de violencia crónica, violencia sostenida por parte de los adultos en perjuicio de la infante, quien además, como lo ha señalado el Ministerio Público y es de toda lógica pensar, no tuvo ninguna opción o posibilidad de ejercer defensa".