El caso de la desvinculación de Isabel Amor de la Dirección Regional del Servicio Nacional de la Mujer (Sernameg) en Los Ríos fue altamente cuestionado por tratarse de una supuesta arbitrariedad de parte de la directora nacional del organismo, Priscilla Carrasco. Este hecho, sin embargo, no sería aislado, pues el 11 de diciembre de 2023 la exjefa de la Unidad de Violencia contra la Mujer, Paula Cifuentes, fue despedida por, supuestamente, tener un "desempeño deficiente en situaciones complejas que afectaron al servicio", según lo señala el acto administrativo que explica su cese. Esto, pese a que había sido ratificada para continuar ejerciendo como funcionaria pública el 28 de noviembre del mismo año. En este caso, sin embargo, la Contraloría General de la República acogió el reclamo formulado por Cifuentes y el pasado jueves 3 de octubre determinó, una vez que se detallarán los antecedentes que justifican el despido, que "de la sola lectura del acto en comento, no se advierten las razones por las cuales los servicios de la requirente dejaron de ser necesarios".