MADRID.- Land Rover ha presentado el prototipo Range Rover Sport con control remoto, un proyecto con el que un conductor podrá dirigir su propio vehículo desde el exterior a través de su teléfono inteligente.
La aplicación incluye control de dirección, acelerador y frenos, así como cambios de suspensión, y permite al conductor andar junto al vehículo, maniobrar desde fuera o sortear dificultades en conducción fuera de la carretera mientras avanza a una velocidad máxima de 6,4 km/h, ha explicado la marca en un comunicado.
Así, el conductor podrá usar el teléfono inteligente para "sacar el vehículo estacionado marcha atrás" si alguien ha aparcado demasiado cerca, o incluso le permitirá guiar el vehículo sobre caminos fuera de carretera sin necesidad de estar dentro.
El sistema de control remoto sólo funcionará si el usuario está a menos de 10 metros del vehículo y si la llave inteligente es detectada.
El sistema usa sensores para evaluar el espacio disponible y esquivar peatones, vehículos u otros objetos y se sirve de un mecanismo de selección que gestiona dirección, frenos y acelerador para hacer "tantos movimientos hacia delante y hacia atrás como se necesite para lograr la maniobra correcta".
Land Rover también ha destacado que las futuras posibilidades para esta tecnología podrán incluir sistema de reconocimiento de voz, "para que el conductor de una simple orden desde el auricular para atravesar obstáculos o salir de una plaza de aparcamiento".