RENO.- Durante el último año Tesla Motors ha hecho noticia por el lanzamiento de su nuevo auto Model X, el anuncio de su negocio de baterías para hogares y las declaraciones de su creador Elon Musk. Pero esta vez la compañía ocupa titulares por un incidente ocurrido el viernes pasado en una de sus fábricas, que terminó con un fotógrafo de prensa detenido.
Según describió la compañía en una publicación
en su blog oficial, un equipo del diario Reno Gazette Journal ingresó el viernes pasado al terreno en Reno, Nevada, donde hoy se construye la "Gigafactory", la fábrica donde se construirán sus baterías de ion litio. La pareja (un fotógrafo y un reportero) entró sin permiso, saltando una reja que, según Tesla, tiene señales que indican que es propiedad privada.
Una vez que los guardias notaron la presencia del equipo, los confrontaron y les dijeron que esperaran mientras llegaba la policía. Pero se subieron a su vehículo, un jeep marcado con la sigla "RGJ". Uno de los guardias se acercó para anotar la patente, tras lo cual el conductor (el fotógrafo Andy Barron) retrocedió el vehículo, botando al hombre, que quedó con heridas en su cadera y sus brazos.
Al partir, el equipo del diario chocó el auto en el que llegaron los guardias. Uno de ellos se acercó, por lo que luego el fotógrafo aceleró en su dirección, impactándolo también.
La policía llegó al lugar y arrestó al fotógrafo, con dos cargos de asalto con un arma y aconsejó que ambos sean formalizados por ingreso a una propiedad privada. El diario Reno Gazette Journal confirmó el arresto de Barron, indicando que "tomamos la situación muy en serio y está actualmente bajo investigación".
El periódico no disputó la historia,
sólo agregando que su vehículo también resultó con daños: el vidrio del conductor fue destruido y el cinturón de seguridad fue cortado.
"Apreciamos el interés en la Gigafactory, pero los repetidos actos de ingreso a la propiedad privada, incluyendo los del RGJ, son ilegales, peligrosos y tienen que parar", agregó la compañía de Elon Musk.