BERLÍN.- La oferta cultural de Berlín incluye de todo. Desde edificios que dan cuenta de la compleja historia de la ciudad y Alemania en general, hasta museos con variadas muestras artísticas. Uno de estos recintos ofrece el que sería un sueño para los fanáticos de los videojuegos: la colección más grande del mundo sobre la industria.
Así lo indicó a Emol el director del "Computer Spiele Museum", Andreas Lange, durante una reciente visita al lugar. "Hay colecciones que tienen más juegos y hardware, y puede que haya alguna con más revistas. Pero no conozco ninguna que tenga una colección tan amplia representando el mundo de los videojuegos, con una combinación de juegos, consolas, literatura y material promocional", afirma.
En términos concretos, el museo de la capital alemana cuenta con más de 25 mil títulos, obtenidos principalmente a través del sistema de calificación de videojuegos en el país. La entidad que realiza esta tarea creó el museo en 1997, cediendo el control de su cada vez más grande biblioteca de juegos.
Pese a la enormidad del catálogo, la cara visible del museo es más pequeña. Actualmente el Computer Spiele Museum ocupa una esquina pequeña de un edificio en el centro de la ciudad, donde ofrece una exhibición con una línea de tiempo de la evolución del género, llegando aproximadamente hasta mediados de la década pasada. "Se nos acabó el muro", dice Lange.
Lo más atractivo para quienes visitan el recinto es la cantidad de títulos disponibles para su uso liberado. Consolas de distintas generaciones y marcas, y juegos de arcade están repartidos a lo largo de la exhibición.
El museo logra sustentar sus operaciones con la entrada cobrada (8 euros), pero el presupuesto apenas alcanza para pagarle a sus empleados. "Somos un museo privado, no recibimos financiamiento público. Así que estamos buscando financiamiento externo para ampliar la colección y buscar un nuevo espacio", comenta Lange. Si logran dejar su locación actual, en la que están desde 2011, podrán ampliar el acceso al catálogo.
Los videojuegos como arte
"Queríamos mostrar que los juegos son una parte importante de nuestra cultura. Nuestro objetivo era mostrar que son más que juguetes", comenta Lange, quien agrega que la decisión de hacer esto con un museo tiene su origen en que "en Europa los museos son una plataforma de confianza. Lo que ves en ellos es algo relevante".
Pero ¿son los juegos una forma de arte? Para el director del museo, la respuesta no está tan clara. "Es una categoría filosófica. Pueden ser arte o no, pero en mi idea, la definición de qué es arte o no depende de la intención del artista".
Andreas Lange:
"Queremos mostrar que los juegos son una parte importante de nuestra
cultura. Son más que juguetes"
Por ejemplo, dice, Marcel Duchamp presentó los "ready-made" como trabajos artísticos surgidos de un objeto común. "Los puso en museos diciendo que eran arte. Si los diseñadores de juegos creen que su trabajo es arte, probablemente el producto final lo sea", dice.
Pero también es rápido en aclarar que no cualquier videojuego es arte. "Es muy similar al cine. Hay muchas películas que son entretenidas, grandes estrenos de Hollywood. Y los americanos podrían decir que eso es arte, pero quizás nosotros en Alemania somos un poco más escépticos en esa definición".
Más allá del aspecto artístico, Lange asegura que los videojuegos son un reflejo de la sociedad actual. "Por eso nos gustan. La fascinación de los juegos es que, por un lado, son un mundo en sí mismo, donde si perdemos no hay consecuencias, pero por otro lado, hay mecanismos y reglas que representan parte de nuestra vida diaria pero llevándola a otro nivel. Y eso los hace interesantes de jugar. Reflejan algo importante de nuestra vida, a su propia manera", concluye.