LIMA.- Científicos peruanos y franceses buscan ubicar 33 pueblos en la región de Moquegua (al sur de Perú) sepultados en febrero del año 1600 por la erupción de un volcán, la mayor ocurrida en el continente y que ha sido denominada "La Pompeya de Latinoamérica".
En esa fecha el volcán Huaynaputina en Moquegua —1.220 km al sur de Lima— erupcionó con explosiones de más de 30 km de altura y flujos piroclásticos (mezcla de gases volcánicos, rocas calientes y aire atrapado) que avanzaron a unos 300 km por hora con temperaturas de 400 a 1.200 grados centígrados.
Todo quedó sepultado, según informó a la AFP Luisa Macedo, ingeniera del oficial Observatorio Vulcanológico del Instituto Geofísico Minero Metalúrgico (Ingemmet), que encabeza las pesquisas.
"Investigaciones nos indican que, un año después de la erupción en Moquegua, la temperatura bajó en todo el planeta en 1,3 grados", precisó.
En tres expediciones (agosto, octubre y noviembre) se ha detectado con equipos modernos a seis pueblos sepultados entre tres a quince metros de profundidad, informó. Aún se desconoce la extensión del área sepultada.
La zona puede convertirse en un museo de sitio, similar a los restos de Pompeya, ciudad de la antigua Roma que fue enterrada por la violenta erupción del volcán Vesubio en el 79 d.C, cerca de la moderna ciudad de Nápoles, dijo un vocero del gobierno regional.
Cada expedición contó con 10 a 20 investigadores, encabezados por personal del Observatorio, del Instituto de Investigación para el Desarrollo (IRD) de Francia y de la Universidad La Réunion de Francia. Además, participan expertos de Bélgica, Bolivia, Chile y de historiadores de Moquegua.
El proyecto de investigación del Observatorio Vulcanológico de Ingemmet está calculado para tres años.
"Se espera encontrar detalles de la vida común de la época, que fue de transición entre los incas y el virreinato español. Era el momento en que la colonia estaba tratando de reunir los caseríos y congregarlos para hacer grandes ciudades. Esa zona era altamente agrícola", dijo la científica.
La región de Moquegua y algunos municipios se han comprometido a apoyar económicamente el proyecto del Observatorio, para poder desenterrar los pueblos una vez que sean ubicados.