SACRAMENTO.- Los reguladores de California que deciden sobre cómo permitir el uso futuro de vehículos sin conductor, escucharon el jueves ambas posturas. Los defensores del consumidor señalaron que la postura cautelosa del estado fue la correcta, mientras que las empresas que desarrollan la tecnología comentaron que las normas actuales demorarán el despliegue de vehículos que prometen enormes beneficios de seguridad.
El Departamento de Tránsito del estado escuchó los comentarios en un taller en un momento en que se debate sobre cómo mantener la seguridad pública mientras madura una tecnología imperfecta, pero sin presentar tantas regulaciones como para entorpecer el desarrollo de los vehículos.
La agencia buscó sugerencias de posibles cambios a una propuesta de regulaciones que sienta precedentes y fue publicada el mes pasado. Dichas regulaciones dictarán la manera en que los californianos pueden adquirir los autos una vez que las compañías superen la fase actual de prueba de prototipos.
Debido a que California ha sido la cuna del desarrollo y regulación de la tecnología, lo que sucede en el estado tiene eco a nivel nacional.
Lo que el Departamento de Tránsito esperaba se convirtiera en una discusión técnica sobre el lenguaje legal, se convirtió en una serie de comunicados sobre los méritos de la tecnología. Los más entusiastas fueron los defensores de las personas invidentes, un grupo que no ha sido parte central del debate de regulaciones. Muchos de ellos afirmaron que la tecnología puede cambiarles la vida y que la agencia no debe entrometerse.
"Por favor, no dejen a mi familia sin soluciones", dijo Jessie Lorenz, invidente y que depende del transporte público para llevar a su hija de 4 años a la escuela. Lorenz preferiría utilizar un vehículo autónomo para eso o para un "viaje espontáneo".
Dijo que ha paseado en un vehículo sin conductor que desarrolla Google, "y fue grandioso".
El abogado de la agencia, Brian Soublet, comentó que la dependencia aprecia los posibles beneficios para los discapacitados, pero su enfoque debe centrarse en la seguridad de todo el público.
Google quiere que California autorice los caminos para el uso de la tecnología, y expresó su decepción en las propuestas de la agencia, que indican que los vehículos sin conductor deben tener un volante en caso de que fallen las computadoras y los sensores. Además, debe haber un conductor con licencia en el asiento del piloto, listo para tomar el control.