EL CAIRO.- La maquinaria propagandística se puso a trabajar a toda máquina en El Cairo cuando hace un año se disparó la expectación con la teoría del egiptólogo Nicholas Reeves, que no sólo revolucionó el mundo académico. El Ministerio de Antigüedades egipcio convocó ruedas de prensa, mostró imágenes realizadas con radar y se mostró confiado de que sí se iba a realizar un hallazgo sensacional.
A principios de abril, otro escáner en el Valle de los Reyes tenía que proporcionar pruebas, pero desde entonces nada se sabe. No se han reportado hallazgos, no se han convocado conferencias de prensa ni se escuchan comentarios eufóricos del ministro al cargo.
En tanto impera cierto desconcierto, pues las últimas mediciones con radar no sólo no arrojan prueba alguna de que haya más habitáculos en la famosa cámara funeraria de Tutankamón (descubierta en 1922), sino que además parece que contradicen las mediciones realizadas hasta ahora.
Fueron precisamente unas estructuras lineales las que suscitaron la curiosidad de Reeves. En imágenes de alta definición de la pared norte y oeste de la cámara funeraria del faraón niño Tutankamón, el científico británico creyó ver accesos que habían sido tapiados.
El ex ministro de Antigüedades Mamouh Eldamaty dijo que podría ser el "descubrimiento del siglo".
Pero Reeves, que publicó su teoría hace un año, apuntaba además que tras la pared norte se podría encontrar la momia de Nefertiti, cuyo busto atrae a numerosos visitantes al museo donde se encuentra en Berlín.
Tras las declaraciones de Reeves muchos académicos se mostraron de acuerdo con que las estructuras halladas en las paredes indicaban la posibilidad de que tras las paredes hubiese habitáculos o pasillos. En marzo, el entonces ministro de Antigüedades incluso llegó a decir de que la posibilidad de hallar cámaras todavía no descubiertas era del "90 por ciento".
Esas afirmaciones se hicieron tras examinar las mediciones con radar realizadas por el experto Hirokatsu Watanabe. El científico japonés decía estar seguro de haber reconocido dos habitáculos, pero no material orgánico ni metálico. Watanabe nunca publicó los datos de su medición. Y a ello se suma que había modificado su equipo de forma que sólo él podía interpretar los datos.
Se empleó otra medición de radar, en esta ocasión con un ingeniero de "National Geographic", según informó la revista. Con dos frecuencias diferentes se hicieron 40 escáneres y estas pruebas no han confirmado indicio alguno de que haya más cámaras, según ha informado la revista.
Varios científicos interpretan estos datos como que no hay rastro de más cámaras. El geofísico Dean Goodman dijo al "National Geographic": "Si tuviésemos un espacio hueco se debería reflexionar mucho", pero sencillamente no existe.
El Ministerio de Antigüedades en El Cairo no se pronuncia al respecto. Es cierto, dice, que los científicos no se pusieron de acuerdo durante una conferencia en mayo en El Cairo sobre si se sostiene la teoría de Reeves. "Se realizarán más escáneres porque posiblemente hubo señales que podrían haber alterado" los datos, dijo una portavoz, que no ofreció una fecha para las mediciones. Ni tampoco hay anunciadas más ruedas de presa.
Poco se puede palpar ahora de la euforia sobre el "descubrimiento del siglo".