SANTIAGO.- La historia de Motorola durante los últimos años ha estado marcada por una serie de cambios. Primero, la histórica firma se separó en dos, dejando su negocio de móviles como una unidad independiente que, un par de años después, fue vendida a Google.
De la experiencia bajo la empresa del buscador salieron productos que definen su apuesta pública hasta hoy, incluyendo los smartphones Moto G y X, pero pese a esto, fue vendida en 2014 a Lenovo. Hoy, la compañía presenta en Chile la cuarta generación del Moto G, pero también define cómo desplegará su estrategia de móviles bajo el alero de la firma china.
Fernando Sánchez, ex director de Motorola Mobility en Chile y ahora gerente general de Lenovo Mobile Business Group (MBG) para Latinoamérica Sur, describe el paso al control de Lenovo como una experiencia positiva, donde el trabajo previo de Motorola está redefiniendo las apuestas móviles de la empresa asiática.
"Cuando Lenovo compró Motorola, compró la marca y ha respetado toda la estrategia de portafolio. Más que ellos influir en nosotros, nosotros estamos influyendo en lo que ellos traían. Hoy todo el diseño, ingeniería y fabricación tanto en los teléfonos Vibe (vendidos bajo la marca Lenovo) como Moto, está siendo hecho por la misma gente que hacía los Moto hace un tiempo", dice el ejecutivo chileno, agregando que la relación entre ambas marcas se verá de mayor manera en los futuros lanzamientos de Vibe, cuyos últimos dispositivos llegaron a Chile recientemente.
El compromiso con el portafolio se ve en la nueva serie Moto G, que por primera vez incluye tres equipos: un modelo base, Moto G Play; uno intermedio, Moto G4; y uno más avanzado en detalles técnicos, el Moto G4 Plus. Todos estarán en rangos de precio entre $150 mil y $250 mil, cubriendo el mismo segmento que los anteriores modelos de la serie.
"Ese segmento de precio es muy relevante en el mercado local, hay distintos consumidores ahí. Hay algunos que quieren algo como el G del año pasado o el G4 Play, con una pantalla de buena resolución y una buena batería, pero que no buscan funciones avanzadas como un foco láser en la cámara o el 'Turbocharge' para la carga de batería Pero hacia arriba, y esta es nuestra apuesta con el G4 Plus, creemos que hay mucho consumidor que está mirando los productos Premium", explica Sánchez.
La segunda parte de la estrategia de Lenovo y Moto para 2016 es el Moto Z, su nuevo teléfono tope de línea, que incluye la característica de poder conectarse a accesorios como proyectores o parlante externos, accesorios bautizados como Moto Mods.
El teléfono, que llegaría a Chile en septiembre, nace de una búsqueda por "algo distinto". "Si uno mira la industria a fines de los '90, inicios de la década del 2000, había teléfonos qwerty, clamshells, cosas entretenidos. Después del iPhone, todos quisieron ser más iPhone y faltan cosas nuevas", explica Sánchez, agregando también que la compañía está organizando una competencia a nivel mundial para que usuarios desarrollen sus propios "Mods". "Vemos que en el mundo del software hay ecosistemas mucho más abiertos, donde dos personas se juntan en una oficina, arman algo, lo lanzan y es un éxito. Estamos intentando crear ese mismo ecosistema para el hardware", concluye.