MÚNICH.- Un grupo de investigadores analizaron temporalmente por primera vez los sedimentos de restos de una explosión estelar en la Tierra.
Los físicos de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) pudieron comprobar en dos prospecciones petrolíferas en el Océano Pacífico hierro Fe-60 de cerca de 2,7 millones de años de edad de una supernova. Esto es un tipo de elemento que se produce en estrellas suficientemente grandes y que no existe realmente en la Tierra.
De acuerdo con el comunicado emitido este miércoles, la elevada concentración de Fe-60 alcanzó su mayor valor hace cerca de 2,2 millones de años y volvió a desparecer hace cerca de 1,5 millones de años.
Los resultados de la investigación han sido publicados en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences, también conocida por sus siglas PNAS.
Los restos analizados ahora proceden presuntamente de la asociación estelar Scorpius-Centaurus OB, que presentó su máximo acercamiento a nuestro sistema solar con cerca de 300 años luz hace cerca de 2,3 millones de años.
En los últimos entre 10 y 15 años se han producido en esta asociación estelar entre 15 y 20 supernovas.