WALLINGFORD.- Plaguicidas del grupo de los neonicotinoides podrían estar poniendo en riesgo no sólo a las abejas de miel, sino también a las abejas salvajes y a las mariposas, según nuevos estudios difundidos por dos equipos de investigadores en revistas especializadas.
Un estudio del Centro para la Ecología y la Hidrología británico (NERC) establece una relación entre el empleo de neonicotinoides y el retroceso en la población de abejas salvajes. Para su análisis, los investigadores -liderados por el insectólogo Ben Woodcock- investigaron qué efectos tuvo el empleo de neonicotinoides en 62 especies de abejas salvajes en el Reino Unido de 1994 a 2011.
El resultado, publicado en la revista especializada Nature Communications, arrojó que las poblaciones de especies de abejas salvajes que se alimentaron sobre todo con colza tratada con neonicotinoides se redujeron tres veces más que aquellas que prefieren otro alimento. En el caso de cinco especies de abejas salvajes analizadas se pudo incluso determinar que el empleo del pesticida redujo en un 20% las poblaciones.
"La colza es muy útil para los insectos polinizadores", explicó Woodcock en un comunicado. "Sin embargo, este aprovechamiento parece haber sido suprimido para una serie de especies de abejas salvajes por los efectos del tratamiento con neonicotinoides", afirmó. A diferencia de las abejas de miel, las abejas salvajes suelen vivir solas.
En tanto, un estudio norteamericano indicó que la población de mariposas también se ve amenazada por los pesticidas así como por la destrucción de su ecosistema.
El equipo de científicos liderado por el biólogo Matthew Forister de la Universidad de Nevada analizó las existencias de 67 especies de mariposas en el norte de California en base a datos de los últimos 40 años. El resultado señaló que el número de especies de mariposas se está reduciendo dramáticamente, sobre todo desde 1995, cuando fueron empleados por primera vez en la región los neonicotinoides.
Los neonicotinoides actúan por ingesta y contacto en las células nerviosas de los insectos y tienen como fin proteger a las plantas de los insectos succionadores y mordedores.