SANTIAGO.- Datos importantes, claves de seguridad e incluso números de identificación son parte de la información que algunos usuarios aún mantienen "ocultas" dentro de sus contactos en los teléfonos móviles. Sin embargo, la cantidad de aplicaciones que acceden a esta información podría ser un factor a considerar en la privacidad.
Esta es la polémica que reabrió la nueva aplicación "
America First" que permite seguir la campaña presidencial de Donald Trump en Estados Unidos. Si bien el software solicita al usuario que permita el acceso a los contactos -como muchas otras app para buscar nuevos usuarios-, la posibilidad de acceder a información privada es muy alta.
El principal problema de almacenar datos como contraseñas "ocultos" entre los contactos de teléfonos radica en que esta base de datos -a la que accede gran parte de las aplicaciones- no se encuentra encriptada, es decir, es de muy fácil acceso para algún hacker que quiera llegar a la información.
Según expertos en seguridad, esta tendencia de guardar información en el libro de contactos radica en su sincronización con múltiples plataformas rápidamente, así se tiene acceso a estos datos de manera fácil y en cualquier situación. No obstante, son datos que los usuarios deberían proteger con un poco más de recelo.
Alternativas para almacenar contraseñas
Actualmente, tanto para Android como para iOS existe una gran variedad de aplicaciones dedicadas al almacenamiento de datos sensibles o administradores que contraseñas, que no sólo entregan combinaciones "más seguras", sino también cuentan con espacios para escribir datos que luego serán encriptados.
Software como "
Last Pass" o "
Dashlane" se encuentran gratuitos en las tiendas de aplicaciones de ambos sistemas operativos para lograr una mayor protección de los datos importantes que almacenan los usuarios en sus smartphones.
Si bien en esta oportunidad la polémica la abrió la aplicación del candidato republicano a la presidencia estadounidense, bien podría haber sido un software mucho más común como lo es Facebook o Twitter, que también solicitan permiso para acceder a los contactos.
El principal consejo de los expertos es evitar poner información, aunque los usuarios crean que está oculta, en bases de datos no encriptadas como son los contactos en el teléfono, ya que con esto las personas se exponen a grandes vulnerabilidades que podrían afectar sus finanzas o la seguridad de su hogar.