MARRAKECH.- Las emisiones mundiales de dióxido de carbono se han mantenido sin cambios en los últimos tres años, según mostró este lunes un nuevo estudio, lo que aumenta la esperanza de que el mundo se esté acercando a un momento decisivo en la lucha contra el cambio climático.
Sin embargo, los autores de la investigación advirtieron que no está claro si la reducción de emisiones de CO2, ocasionada principalmente por la disminución en el uso de carbón mineral en China, es una tendencia permanente o temporal.
"Es demasiado pronto para proclamar que hemos alcanzado un tope", señaló Glen Peters, coautor del informe e investigador en el Centro para la Investigación Internacional del Clima y el Medio Ambiente en Oslo.
El estudio, publicado en la revista Earth System Science Data, indica que las emisiones globales de CO2 a partir de combustibles fósiles y la industria crecerán sólo 0,2% este año.
Eso significaría que las emisiones se han mantenido en aproximadamente 36 mil millones de toneladas métricas en los últimos tres años a pesar de que la economía mundial se ha expandido, lo que deja entrever que los vínculos históricos entre las ganancias económicas y el aumento en las emisiones podrían haber sido cortados.
"Éste podría ser el momento decisivo que hemos estado esperando", comentó David Ray, un profesor en el manejo de carbono de la Universidad de Edimburgo, quien no estuvo involucrado en el estudio. "Para afrontar el cambio climático esos vínculos deben romperse y aquí tenemos las primeras señales de que al menos se están empezando a soltar".
El impacto de las mineras chinas
Los autores del estudio atribuyeron la disminución en las emisiones de gases del llamado efecto invernadero principalmente a una disminución en el consumo de carbón mineral en China desde 2012. El carbón es una fuente importante de emisiones de dióxido de carbono.
Las emisiones chinas disminuyeron 0,7% en 2015 y se pronostica que caerán 0,5% en 2016, explicaron los investigadores, aunque indicaron que las estadísticas de energía de China han estado plagadas de inconsistencias.
Peters detalló que aún no está claro si la disminución de emisiones en China se debió a la reestructuración de la economía del país o si es una señal de inestabilidad económica.
"No obstante, la inesperada disminución de las emisiones chinas da esperanza de que el mayor generador de emisiones del mundo puede proporcionar reducciones mucho más ambiciosas", agregó.
China, que representa casi el 30% de las emisiones globales de CO2, prometió que el pico de sus gases generados ocurriría alrededor de 2030, como parte del pacto climático global alcanzado en París el año pasado. Muchos analistas dicen que el pico de ese país probablemente ocurrirá mucho antes, y quizá podría ya haber ocurrido.
"La disminución continua de emisiones de CO2" en China, combinada con el conocimiento del cambio estructural en el sistema de energía, indica ciertamente que las emisiones de dióxido de carbono en ese país podrían haber alcanzado su nivel máximo. Sin embargo, se necesitan unos pocos años más de datos para confirmar esto", explicó Bill Hare, de Climate Analytics, un grupo aparte que monitorea las emisiones globales.