LONDRES.- Los guepardos están mucho más amenazados por el peligro de extinción de lo que se pensaba hasta ahora, así lo revela un nuevo estudio publicado en la revista Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias estadounidense (PNAS).
Los investigadores subrayan que apenas hay 7.100 de estos animales viviendo en una superficie de apenas un 9% de la que ocupaban originalmente. Es por ello, que los científicos solicitaron que el nivel de amenaza de los guepardos pase de "amenazados" a "gravemente amenazados" en la Lista Roja de las especies de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Una gran parte de estos felinos vive en África, cerca 7 mil habitan al sur del Sahara en las sabanas y estepas, mientras que en Irán existen menos de 50 ejemplares del subtipo Acinonyx jubatus venaticus.
Sus cuerpos pueden medir hasta 150 centímetros de largo, además de los 70 centímetros de cola, y 80 centímetros de alto hasta los hombros, suelen pesar apenas unos 60 kilos. Esta complexión particular tratándose de felinos les permite alcanzar, durante la caza, una velocidad de unos 90 kilómetros por hora, lo que los convierte en los animales terrestres más rápidos del mundo.
Sus hábitats en África están muy dispersos y en muchos casos no están vigilados: sólo un 23% se encuentra en zonas protegidas, según apuntan los científicos en torno a Sarah Durant, de la Sociedad Zoológica de Londres.
Las zonas protegidas que existen en la actualidad son insuficientes para preservar las actuales 33 poblaciones de la extinción, subrayan los expertos.
Además, las proyecciones a futuro de estos grupos se hacen sobre la base de cálculos en las zonas protegidas, lo que arroja un resultado mucho más optimista del real, pues los guepardos en las áreas no vigiladas están mucho más amenazados por conflictos con seres humanos, por la falta de presas, la dispersión y la desaparición del hábitat, así como el tráfico ilegal con estos animales.
Es por ello que los investigadores realizaron diferentes cálculos para predecir el desarrollo de las poblaciones bajo distintas condiciones y llegaron a la conclusión de que tendrían que aumentar de manera no realista en las áreas protegidas para compensar las pérdidas en las no vigiladas.
El estudio concluye con un llamado para el desarrollo de una propuesta para las poblaciones que están disminuyendo que permita una coexistencia entre el ser humano y los felinos. Si no se toman medidas, se ve amenazada no sólo la existencia de los guepardos, sino también de otras especies que viven de forma dispersa, advierten los científicos.