American Heart Association (Archivo)
WASHINGTON.-Es normal que con la edad las personas pierdan células cerebrales y el cerebro se encoja, lo que puede afectar en el aprendizaje y memoria. Sin embargo, esto no siempre es así, un estudio publicado en la revista Neurology, indica que quienes sigan una dieta mediterránea mantienen más volumen cerebral.
El trabajo realizado por un equipo encabezado por la doctora Michelle Luciano, de la Universidad de Edimburgo, asegura que las personas mayores que siguieron una dieta mediterránea conservaron más volumen cerebral durante los tres años de la investigación, que aquellos que no la siguieron.
Esta dieta consiste en el consumo de grandes cantidades de frutas, verduras, aceite de oliva, legumbres y cereales como el trigo y el arroz, además de cantidades moderadas de pescado, productos lácteos y vino. En tanto, la carne roja y aves de corral se deben comer en cantidades más limitadas.
"A medida que envejecemos, el cerebro se encoge y perdemos células cerebrales que pueden afectar el aprendizaje y la memoria (...). Este estudio agrega pruebas que sugieren que la dieta mediterránea tiene un impacto positivo en la salud del cerebro", aseguró en la publicación deLuciano.
Para su trabajo, los investigadores recopilaron información sobre los hábitos alimenticios de 967 escoceses de alrededor de 70 años que no sufrían demencia. A 562 de ellos se les hizo una resonancia magnética a los 73 años para medir el volumen total de su cerebro.
De ese grupo, 401 personas regresaron para una segunda resonancia magnética a los 76 años, lo que permitió comparar sus volúmenes cerebrales y establecer una relación con su dieta.
Las personas que no siguieron tan de cerca la dieta mediterránea fueron más propensas a tener una mayor pérdida de volumen total de cerebro durante esos tres años, que las personas que siguieron la dieta más fielmente, según el estudio.
Asimismo, los resultados no variaron cuando se tuvieron en cuenta otros factores que podrían afectar el volumen cerebral, como la edad, educación, padecer de diabetes o presión arterial alta. Además, no se determinó que el consumo de pescado y carne estuvieran relacionados con los cambios cerebrales, lo que contradice estudios anteriores.
"Es posible que otros componentes de la dieta mediterránea sean responsables de esta relación, o que se deba a todos sus componentes combinados", comentó Luciano.
El estudio "sugiere que la dieta puede ser capaz de proporcionar una protección a largo plazo para el cerebro (...). Pero se necesitan estudios más amplios para confirmar estos resultados", agregó.