BARCELONA.- Después de años enfocada en el mundo corporativo y del software, finalmente BlackBerry anunció su regreso al mercado general de smartphones, a través de un equipo que respeta el legado de la compañía canadiense a través de la inclusión de un teclado físico, pero que también apunta a masificarse, basando su funcionamiento en Android.
Pero los cambios no terminan ahí. El recién anunciado equipo KEYone es el resultado de una sociedad entre la canadiense BlackBerry y la compañía china TCL, bajo el cual la última tiene una licencia para fabricar y vender teléfonos con la marca "BlackBerry" en todo el mundo. Y con eso, la estrategia cambia.
Durante los últimos años, BlackBerry apostó por una plataforma propia –BlackBerry 10– y luego por equipos que aunque usaban Android, se vendían en pocas unidades y enfocados al mundo corporativo. Ahora TCL buscará ampliar eso al mercado masivo.
"Sabemos que la gente dejó BlackBerry por una razón. Dejaron de invertir en investigación y desarrollo y se enfocó en el mundo corporativo. Continuaremos mirando ese segmento, sin embargo, también nos enfocaremos en los 'prosumers', usuarios profesionales, personas jóvenes exitosas", explica Stephen Curwood, director de marketing de BlackBerry. "Este grupo quiere ser único, no quieren seguir al resto. Esas personas dejaron BlackBerry por una razón y queremos darles algo para que vuelvan".
Esa razón es KEYone, un equipo que incorpora un teclado físico y una pantalla táctil, corriendo la última versión de Android. El smartphone suma el clásico software de BlackBerry para manejo de cuentas y mensajes (BlackBerry Hub) pero también incluye novedades como un lector de huellas dactilares en la barra espaciadora del teclado y atajos en las distintas teclas.
Esta función es particularmente interesante. Se puede configurar el sistema para que al apretar la tecla "w" se abra WhatsApp o "c" para que lleve de inmediato a la ventana de composición de correos. Los atajos responden rápido y dan la sensación de una mayor integración entre el teclado y el software, haciendo que el diseño en general parezca más unificado.
El teléfono también ofrece una cámara trasera de 12 megapixeles con el mismo sensor Sony de los celebrados equipos Pixel de Google (reconocidos precisamente por la calidad de sus imágenes) y una frontal de 8 MP que, tal como el iPhone, usa la pantalla como flash. Incluye 32 GB de almacenamiento (expandibles con una tarjeta microSD hasta 2 TB), 3 GB de RAM y una batería que soporta cargarápida (50% en 36 minutos) y que incluye el sistema "Boost" que al activarlo, desactiva funciones del teléfono para cargar aún más rápido.
La compañía está consciente del desafío que significa volver a posicionarse en un mercado donde antes eran líderes y que hoy está dominado por Apple, Samsung, Huawei y otras.
Pero ven que el reciente interés por
marcas de "nostalgia" les da una oportunidad. "En este show hay dos teléfonos que se han robado la atención. Uno es el 3310 de Nokia y el otro es KEYone. Si lo piensas, 3310 fue probablemente el primer teléfono de mucha gente y para muchos, su primer smartphone fue un BlackBerry. Ahora los dos vuelven", comenta Curwood.
"Queremos construir sobre esto", agrega. "Sabemos que no va a pasar de un día a otro, tenemos un plan de varios años para lograr que BlackBerry sea lo que fue antes. Si podemos llegar más allá de los fanáticos de BlackBerry y lograr que nos consideren, creo que nos iría muy bien".
BlackBerry KEYone iniciará su lanzamiento alrededor del mundo a partir de abril, con un precio sugerido de US$ 549. Si bien se confirmó su arribo a Latinoamérica, no se ha anunciado una fecha concreta.