WASHINGTON.- Científicos revelaron que excrementos fosilizados que serían de dinosaurios herbívoros ornitópodos, que habitaron el sur del estado de Utah hace 75 millones de años, contenían trozos de caparazones de crustáceos junto con vestigios de vegetación, complicando así la teoría que sólo los situaba alimentándose de plantas.
El descubrimiento brinda la evidencia más firme hasta la fecha de que algunos dinosaurios herbívoros grandes se salían de la dieta puramente vegetariana, detalla la paleontóloga Karen Chin, de la Universidad de Colorado, que lideró el estudio publicado en la revista Scientific Reports. "Fue un hallazgo muy emocionante, precisamente porque fue tan inesperado", afirmó.
Los excrementos fosilizados, llamados coprolitos, ofrecen un vistazo a la dieta de criaturas extintas que no se puede observar estudiando los dientes, mandíbulas o esqueletos.
Diez coprolitos encontrados en el monumento nacional Grand Staircase-Escalante, un área protegida en Utah, contenían caparazones de crustáceos mezclados con madera podrida de coníferas. Al menos durante una parte del año, estos dinosaurios ornitópodos habrían comido madera porque contenía crustáceos y otros invertebrados, explicó Chin.
La paleontóloga detalló que los investigadores no saben con exactitud qué tipo de crustáceos comían los dinosaurios, pero que era posible que fueran cangrejos. De acuerdo a los análisis, los crustáceos eran de al menos cinco centímetros de largo.
Los investigadores piensan que el alimentarse de crustáceos habría sido un cambio de acuerdo a la temporada en su dieta, algo que podría estar relacionado con la reproducción y la puesta de huevos. Algunos pájaros, descendientes de los dinosaurios, consumen más proteína y calcio durante la temporada de reproducción.