Reuters (Imagen referencial)
MOUNTAIN VIEW.- El protocolo ético internacional frente al hallazgo de fallas y vulnerabilidades en algún software estipula que se le debe dar un plazo de 90 días a los desarrolladores para que encuentren una solución y publiquen un parche para los usuarios. Y fue precisamente lo que pasó en un nuevo problema entre Google y Microsoft, sin embargo, el error aún no tiene solución y la gente ya sabe de él.
Fue en noviembre del año pasado cuando Google informó a Microsoft que su navegador, Edge, tenía un error. Todo esto siguiendo el protocolo que no siempre ha sido una insignia para las compañías que llevan años enfrentándose, principalmente por el éxito de Chrome entre los usuarios que lo prefieren por sobre el sucesor de Internet Explorer.
A pesar de tener el tiempo dictado -y un plazo de 14 días adicionales para coincidir con la actualización de seguridad de Microsoft de febrero- la firma no logró solucionar el error, detallando que "el problema es más complejo de lo que inicialmente anticipamos"; y por ahora no es claro cuándo estará listo el parche de seguridad.
Es por esto que Google decidió salir al público. Si bien no es lo recomendado en estos casos por los expertos, ya que al informar de estas "ventanas" se les da una ventaja a los hackers que quieran sacar provecho de ella y vulnerar a los usuarios, Google y Microsoft llevan años enfrentándose ante este tipo de cosas.
Ya en el pasado, la filial de Alphabet se ha saltado el protocolo. En 2016 Google sólo le dio 10 días a Microsoft para arreglar un bug en Windows. Mientras que cuando sus ingenieros encontraron el error de Meltdown y Spectre, esperaron cerca de seis meses a que Intel y AMD buscaran soluciones a estos problemas.