ESA/ROSETTA/NAVCAM - CC BY-SA IG
PARÍS.- El cometa 67P/Churyumov–Gerasimenko, compuesto por dos lóbulos, y que es el actual hogar de la apagada sonda Rosetta, se originó tras el choque de dos cuerpos celestes de poca densidad y elementos volátiles que les permitió acercarse lentamente sin llegar a explotar.
El hallazgo publicado por la revista Nature Astronomy también permitió explicar los agujeros y capas estratificadas que presenta el cometa también conocido como "Chury", que aparecieron probablemente cuando se reagruparon los restos tras la colisión.
La investigación liderada por Patrick Michel, del centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) de Francia comprobó que estos choques no sólo se han producido en el Sistema solar hace 4 mil millones de años, sino que pueden ser más recientes.
Según los autores, estas colisiones son también frecuentes en el cinturón de Kuiper, zona de de donde proviene el famoso cometa, por lo que su origen puede ser más reciente de lo que se creía.
Las conclusiones se lograron gracias al uso de simuladores digitales realizadas en el Observatorio de la Costa Azul, en el sureste de Francia, luego de que la sonda Rosetta de la Agencia Espacial Europea (ESA) aterrizara en este cometa el año 2016.
El instrumento consiguió recopilar datos para conocer mejor el origen de la Tierra y del Sistema Solar. La misión de Rosetta comenzó el año 2004 con un presupuesto de mil millones de euros y es considerada una de las más importantes en la historia de la industria aeroespacial europea.