Luis Rodrigo Valdés, El Mercurio
SANTIAGO.- "Es necesario que haya más participación de mujeres en todos los ámbitos de la investigación, en todas las disciplinas del conocimiento", así explica el problema que existe actualmente en la equidad de género en la ciencia Vania Figueroa, doctora en ciencias y profesora asistente del Instituto de Ciencias de la Salud de la Universidad de O'Higgins.
El problema de la falta de rostros femeninos en esta materia es algo que se ha perpetuado en el tiempo y que académicas y científicas en todo el país están intentando cambiar. Es por esto que Figueroa, junto a dos colegas de la Red de Investigadoras Marlene Rosales, doctora en fitopatología; y Adriana Bastías, doctora en ingeniería genética vegetal, dictarán una charla denominada "Mujeres en Ciencia" este miércoles 4 de abril.
La cita, organizada por la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile, es abierta a todo público y se realizará en el pabellón G del Campus Juan Gómez Millas de la casa de estudios estatal desde las 14:30 horas.
Figueroa también aborda que "Chile es uno de los países con los peores indicadores en las tasas de participación femenina en investigación a nivel latinoamericano".
Algo que también lamenta la doctora y académica de la Universidad Autónoma, Adriana Bastías en conversación con Emol: "La ciencia, al igual como en el resto de la sociedad, es un lugar donde el rol de la mujer no accede a los espacios de poder. Las jerarquías académicas superiores, no estamos representadas como mujeres investigadoras".
"A nosotras, desde que somos muy pequeñas, nos limitan para crecer en algunas áreas, entonces es una forma de equiparar la cancha que no está bien nivelada", continúa la también socia fundadora y vicepresidenta de la Red de Investigadoras, añadiendo que "hay que romper con los estereotipos de género, desde pequeñas enseñarles a las chicas que ellas pueden ser lo quieran, tienen las mismas capacidades, y no es que ellas, sólo por ser mujeres, sean malas para las matemáticas".
Sin embargo, el problema no sólo está en el ingreso de las mujeres a áreas científicas, "hay barreras que están casi invisivilizadas", señala Figueroa, ejemplificando con "algo tan simple como una carta de recomendación [para optar a un posgrado]. Si uno hace un análisis lingüístico, las redacciones para las mujeres siempre son destacando sus habilidades docentes, su rol de cuidadora; versus a los hombres que siempre se les destaca el rol científico para poder desarrollar investigaciones".
A todo esto, se le suma que en el país "tenemos muy poca vicerrectoras de investigación y todo eso hace que la universidad, que es donde se desarrolla cerca del 70% u 80% de la investigación, sea una estructura completamente masculinizada, por lo tanto las mujeres tiene poco acceso".
Algo que es avalado por Adriana Bastías, quien asegura que "lo que más frena [el avance de la mujer] es la poca visibilización que se le da al aporte femenino en la ciencia, a nivel de investigaciones o de cargos. Es difícil llegar a estos círculos donde hay mayor decisión porque ellos tienen a votar por un par, entonces esta [exclusión] se perpetúa".