SANTIAGO.- Este viernes se conmemora el Día Mundial de los Océanos, establecido por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para alertar sobre la importancia de ellos en la vida del planeta y la necesidad de cuidar la biodiversidad que se alberga en las distintas costas. En este aspecto es precisamente donde Chile destaca como un ejemplo a seguir por otros países.
Actualmente nuestra nación cuenta con 33 Áreas Marinas Protegidas, entre las que destacan las costas de Isla de Pascua, los territorios al sur del país y Juan Fernández, entre muchas otras.
Esto se explica también por la gran cantidad de biodiversidad que existe en los mares nacionales y la importancia que científicos le han dado a este aspecto, algo que ha repercutido en las decisiones políticas en la materia.
"Los avances en el último tiempo, especialmente el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet han sido significativos y reconocidos a nivel mundial", comenta a Emol el académico del departamento de Ecología de la Universidad Andrés Bello, José Pulgar, agregando que "nosotros tenemos una gran extensión de sectores marinos protegidos (...), estamos en una situación bastante interesante en ese sentido".
"La costa chilena, los 4.500 kilómetros de costa que tenemos, es uno de los ecosistemas más productivos del mundo", añade.
Actualmente Chile cuenta con un millón de kilómetros cuadrados de mar bajo resguardo, cifra que se alcanzó tras el decreto del parque marino en Cabo de Hornos e Islas Diego Ramírez, quedando como el quinto país en el mundo de acuerdo a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Sin embargo, Pulgar advierte que "una cosa es el decreto de las áreas protegidas, y otra es la implementación de esta protección, que yo creo que ese es el paso que viene". Junto a esto, asegura que es necesario implementar sistemas de educación a los pescadores y responsables de las zonas que se buscan proteger.
El ejemplo de Chile al mundo
Los esfuerzos que se han concretado en el último tiempo de conservación absoluta son un gran paso que el país ha logrado, pero no por eso lo único que se ha hecho en materia de conservación del medio ambiente y, por sobre todo, de la biodiversidad que existe en las cosas y el mar.
"El país ha tenido herramientas de conservación desde la década de 1980"
José Pulgar, Académico de Ecología UNAB
"Chile ha sido pionero en el desarrollo de herramientas de protección de la biodiversidad y protección de los mares", explica el profesor. "El país ha tenido herramientas de conservación que se han desarrollado desde la década de 1980, principalmente a fines de esta década, con las denominadas Áreas de Manejo y Distribución de Recursos Bentónicos (AMERB)", agrega.
Estas acciones -de acuerdo al Instituto de Fomento Pesquero (IFOP)- consisten en medidas de administración manejadas por el Estado y los usuarios, es decir, se le entrega el terreno a organizaciones de pescadores artesanales con la intención de revertir la condición de sobreexplotación de pesquerías bentónicas.
Para el investigador de la UNAB, estas medidas son beneficiosas para todos los involucrados porque "se traduce finalmente, no sólo en beneficios para las especies afectadas por pesca, sino también las otras que viven en el entorno y que producen incremento en biodiversidad".
"Chile es mirado como un país modelo en términos de protección de la biodiversidad, de hecho, las primeras AMERB fueron miradas desde, prácticamente, todos los mares del mundo y fueron tratadas de implementar en otros sectores, porque es una herramienta que funciona finalmente", puntualiza el experto.
El camino a seguir
Los terrenos marinos protegidos hasta la fecha representan una gran parte de las zonas en que habitan las especies que necesitan mayor protección en las costas nacionales. No obstante, aún queda mucho camino por recorrer.
"Hay lugares en la costa chilena que son bastante particulares y que son focos de alta biodiversidad, por ejemplo La Higuera", comenta el científico. Algo que se condice con la carta enviada por 200 científicos esta semana al Presidente Sebastián Piñera para que decrete un Área de Protección en esta zona, en la Región de Coquimbo, específicamente dirigida a la Corriente de Humboldt.
Por ahora, los investigadores continúan realizando trabajos que ayuden a determinar las zonas específicas que se podrían proteger, buscando los puntos en que ocurren fenómenos de emersión de aguas profundas y ricas en nutrientes que funcionan como "explosiones de diversidad y que afectan al crecimiento y la reproducción de organismos".
"Hay que mirar las herramientas que se han desarrollado hasta ahora, perfeccionarlas y obtener evidencias objetivas porque hemos avanzado un montón, sin embargo, el conocimiento de cómo el ambiente físico varía en el tiempo y que nos permite tomar decisiones objetivas, yo creo que ahí estamos carentes", postula el académico.