SANTIAGO.- Proxima Centuri es una estrella a 4,25 años luz del Sistema Solar, un astro que en 2016 hizo noticia luego de que científicos descubrieran un exoplaneta en que lo orbita con posibilidades para albergar la vida como se le conoce, Proxima b, y que podría ser el objetivo para las misiones interestelares en el futuro. Ahora, dos investigadores analizaron cómo debiese ser la tripulación que viaje hasta este cuerpo rocoso.
En una escala optimista, los viajes a Proxima b no son realidad en el año 2018, ya que en rigor, con la tecnología actual, recorrer la distancia hasta el planeta le tomaría a la humanidad 6.300 años, lo que significa que -descartando la opción de cabinas de criogenización- muchas generaciones de humanos deberían dar su vida en pos de crear una civilización intergaláctica.
Es por esto que dos científicos: Camille Beluffi, de la empresa de investigación francesa Casc4de; y Frédéric Marin, de la Universidad de Estrasburgo, también en Francia, realizaron un análisis para determinar cuántas personas (o parejas) deberían abordar una nave para cumplir esta misión y utilizaron un algoritmo llamado Heritage para calcular las probabilidades de éxito.
En un artículo que recoge la revista MIT Technology Review, del Massachusetts Institute of Technology, los expertos llegaron a la conclusión de se necesitan 98 colonos (o 49 parejas reproductoras) para llegar a un 100% de éxito según el sistema computacional.
"Podemos concluir que, bajo los parámetros utilizados para esas simulaciones, se necesita una tripulación mínima de 98 colonos para un viaje espacial multigeneracional de 6.300 años hacia Proxima b", detallan en la investigación.
¿Qué significa esto? Beluffi y Marin establecieron algunos parámetros base para su propuesta. Por ejemplo, el nivel de endogamia permitido en esta nave es de 0%, por lo que las personas no que se reproduzcan no pueden estar relacionadas sanguíneamente entre sí, esto para reducir complicaciones de salud y contar con una mayor diversidad genética que permita hacer frente a enfermedades.
De acuerdo a la investigación, un escenario con 25 parejas sólo podría tener éxito en un contexto de una crianza muy cuidadosa, pero con 25 hombres y 25 mujeres abordo de la nave, sólo existe un 50% de probabilidades de llegar con humanos vivos a Proxima b.
Cada uno de los escenarios analizados por los científicos franceses también considera una catástrofe de algún tipo, como una plaga, una colisión u otro accidente, que da como resultado la reducción de la tripulación en un tercio.
Este análisis es sólo una primera etapa de investigaciones más profundas que se deben hacer en el futuro, ya que es necesario agregar factores como las tasas de fertilidad en el espacio profundo, que pueden variar respecto a una fecundación en la Tierra, o las probabilidades de que todos los niños nazcan sin complicaciones producto de la radiación espacial.
Otra arista necesaria a considerar son las relaciones humanas. Actualmente se han realizado diversos estudios -principalmente potenciados por la
NASA, la
ESA y
Roscosmos- para determinar el comportamiento de las personas en escenarios de encierro permanente y las formas de evitar los conflictos sociales que pueden terminar en una disminución de la población a bordo, sobre todo cuando se habla de una nave que mantendrá su curso durante 6.300 años.
Si bien estos experimentos han resultado con éxito -en uno incluso se decían menos groserías que en una convivencia normal- sólo se han hecho a escala con un máximo de una docena de científicos "a bordo" de las misiones.