En medio de la isla de Luzón, en Filipinas, un grupo de investigadores encontró los restos fósiles de lo que, aseguran, sería una nueva especie de antepasado de los humanos, dando nuevamente un importante rol a esta zona geográfica en la historia evolutiva de los homínidos que fue publicado en un estudio esta semana en la revista Science.
Se trata de los restos fósiles de dos adultos y un menor de eta nueva especie denominada Homo luzonensis -por el nombre de la isla- y tendrían más de 50 mil años de antigüedad. Philip Piper, académico de la Universidad Nacional de Australia (ANU, por sus siglas en inglés) y coautor de la investigación, explica que los hallazgos representan un gran avance en nuestra comprensión de la evolución humana en todo el sudeste asiático.
"Los restos fósiles incluían huesos de dedos de adultos, así como también dientes. También recuperamos el fémur de un niño. Hay algunas características muy interesantes, por ejemplo, los dientes son muy pequeños", señaló Piper.
"El tamaño de los dientes en general, aunque no siempre, refleja el tamaño corporal general de un mamífero, por lo que creemos que el Homo luzonensis fue -probablemente- pequeño. Exactamente cuánto, aún no los sabemos. Necesitaríamos encontrar algunos elementos esqueléticos desde donde podríamos medir el tamaño del cuerpo con mayor precisión", continuó.
Respecto a las otras características de esta especie, el investigador destacó que "los huesos de las manos y los pies son muy parecidos a los de los australopitecinos que caminaron por África por última vez hace unos 2 millones de años y se consideran los antepasados del grupo Homo, que incluye a los humanos modernos".
El Homo luzonensis comparte algunas características esqueléticas únicas con el famoso Homo floresiensis o "el hobbit", descubierto en la isla de Flores, al sureste del archipiélago filipino.