Una alerta mundial se emitió esta semana cuando la principal aplicación de mensajería WhatsApp reconoció una vulnerabilidad que afecta a su plataforma y que sólo requiere de contestar una llamada de voz a través del software para instalar un programa de vigilancia -también conocidos como spyware- y, aunque ya está solucionado el problema, es necesario que los usuarios actualicen a la última versión de la aplicación.
El problema fue descubierto este mes, y tan sólo en 10 días la firma perteneciente a Facebook cambió su seguridad en una actualización de la app, por esto la recomendación es tener siempre la última versión de los softwares. De acuerdo a la compañía, este problema afecta tanto a usuarios de Android como iOS.
Para actualizar la app es necesario que los usuarios ingresen a la tienda de aplicación oficial de su sistema operativo, ya sea Play Store o AppStore, busquen "WhatsApp" y presionen "actualizar". Para aquellos que no les aparezca la opción, esto es un indicio de que el software ya está en su más reciente versión, por lo que no tienen que efectuar ninguna acción.
Los hackers detrás de esta acción sería NSO Group, una agrupación de origen israelí, responsables del spyware Pegasus, una plataforma que permite ingresar a través de las llamadas de voz de WhatsApp y que instala un código malicioso -o malware- en los dispositivos, con el que luego pueden acceder no sólo a esta plataforma, sino a todo el dispositivo.
El problema fue alertado
durante el fin de semana luego de que un abogado de Derechos Humanos fuese víctima de este malware en su teléfono personal y compartiera la experiencia en redes sociales.
De acuerdo a los reportes de especialistas, en algunos casos los usuarios que tienen el spyware no necesariamente contestaron las llamadas, comunicaciones que incluso a veces desaparecían del registro de la aplicación.
Este es un nuevo problema de seguridad que enfrenta Facebook que desde el año pasado ha debido solucionar problemas en sus tres plataformas más populares, Instagram incluido, además de diversas críticas por falta a la preocupación en la seguridad de sus usuarios.
