Una sonda de la ESA debió realizar una maniobra evasiva para evitar una posible colisión con otro satélite en la órbita baja dela Tierra luego de que su operador, la empresa privada de Elon Musk SpaceX, acusara un error computacional que evitó recibir con éxito este mensaje de alerta.
Oficiales de la Agencia Espacial Europea declararon esta semana que los ingenieros decidieron mover el satélite Aeolus a una órbita más alta luego de que el mes pasado avisaron a SpaceX de este problema a lo que recibieron una respuesta negativa para mover el curso del satélite 44 de la red Starlink.
Esta malla de sondas de Musk corresponde a un proyecto que ya tiene 66 máquinas navegando en torno a nuestro planeta que pretenden entregar un servicio de internet espacial que permita entregar este servicio a localidades de difícil acceso para redes por cable.
SpaceX declaró que esto se debió a un problema de comunicación con la ESA.
El último intercambio de mensajes entre ambos operadores fue el pasado 28 de agosto cuando, de acuerdo a la firma privada, ya se encontraban muy por debajo del umbral para realizar cualquier tipo de maniobra evasiva. "Un error en nuestro sistema evitó que el operador de Starlink viera la correspondencia sobre este evento", declaró la firma, asegurando que de haber tenido una comunicación adecuada habrían coordinado un plan de acción con la agencia.
Por su parte la ESA comentó que su satélite Aeolus -lanzado en agosto del año pasado para medir la velocidad y dirección de vientos en la Tierra- no presentó problemas a raíz de este cambio en su órbita. Sin embargo, alertaron que esta situación es un llamado de atención a la falta de regulaciones en el tráfico espacial y reiteraron que es necesario mejorar la coordinación de satélites entre los operadores.
"Actualmente esta negociación se realiza a través de correos electrónicos, un proceso arcaico que ya no es confiable debido al constante aumento de satélites en el espacio que significan más y más tráfico", explicaron desde la agencia europea, que aprovechó la instancia para sugerir la implementación de un sistema automatizado para tratar posibles colisiones.
Este riesgo aumenta con la cantidad de basura espacial que se ha reportado en los últimos meses y que cada año aumenta debido a la cantidad de sondas y restos de naves que quedan en el entorno de la Tierra.