Fue en mayo de este año cuando Elon Musk finalmente logró lanzar a la órbita terrestre 60 satélites que marcaban el primer paso en el espacio de su red de sondas que le permitiría entregar internet. Starlink es el nombre del proyecto y la autorización actual espera que finalmente sean 12 mil los objetos que circulen en torno a nuestro planeta. Sin embargo, una solicitud fue ingresada por el multimillonario con la que busca la autorización de 30 mil satélites adicionales.
El salto que está proponiendo aquí SpaceX -la firma espacial de Musk- es finalmente tener 42 mil satélites orbitando la Tierra. La solicitud ya fue ingresada, según informa Spacenews, a la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y a la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de Estados Unidos, ambos organismos responsables de "administrar" el espacio en que habitan estas sondas.
Ambas instituciones ya le autorizaron la red de 12 mil sondas, de las que 60 se encuentran en el espacio y que se supone que otras 60 se sumarán este mes y otras 60 más antes de que termine el año. Con esto, Musk lograría la primera etapa de Starlink, al menos de su proyecto inicial.
Cuando estos satélites llegaron a órbita, los astrónomos criticaron al fundador de SpaceX, puesto que los equipos bloqueaban la observación del Universo y "molestaban" el desarrollo de la actividad científica. Junto a esto, en septiembre la Agencia Espacial Europea (ESA) alertó que debió modificar la ruta de uno de sus satélites para evitar la colisión con un miembro de Starlink en el espacio.
En aquella oportunidad desde SpaceX acusaron un problema en la comunicación de la trayectoria de ambos equipos, por lo que la firma privada no modificó el trazo su red.
Otro de los problemas que ha enfrentado Musk con su proyecto es la distancia de la superficie terrestre a la que orbitan. Inicialmente se habló de 1,100 kilómetros y 1.325 kilómetros de distancia, sin embargo, después se redujo a 550 kilómetros de la superficie. Ahora, la solicitud para las nuevas 30 mil máquinas es mucho más complicada.
De acuerdo a lo informado por la revista MIT's Technology Review Elon Musk busca posicionarlos entre 328 kilómetros y 580 kilómetros, una zona en torno a la Tierra que es considerada una de las más "limpias" y por donde, precisamente, viaja la Estación Espacial Internacional (EEI) y donde suelen volar las misiones tripuladas.
El experto de Aerospace Corporation, Roger Thompson, posicionar una gran cantidad de satélites en esta zona podría significar un problema para las futuras misiones que viajen por el espacio.