Este martes se canceló el lanzamiento del primer satélite de la Agencia Espacial Europea (ESA) que tiene el objetivo de estudiar planetas fuera del Sistema Solar. La herramienta presentó un problema con el lanzacohetes Soyuz, de origen ruso, y aún no hay fecha para un nuevo intento.
"Debido a un piloto rojo al comienzo de la secuencia automatizada del sistema de lanzamiento Soyuz, las operaciones se han detenido por hoy", escribió en Twitter Stephane Israel, jefe de la empresa de lanzamiento Arianespace, encargada de posicionar al satélite en el espacio.
Más tarde, la empresa informó que durante las operaciones de cuenta regresiva final, "la secuencia automatizada del lanzador Soyuz se interrumpió 1 hora 25 minutos antes del despegue".
De acuerdo a la compañía, se anunciaría una nueva fecha de lanzamiento "tan pronto como sea posible", y agregó que el lanzador y sus cargas satelitales ahora estaban en un "modo de espera totalmente seguro".
El satélite "Cheops", perteneciente a una misión conjunta entre la Agencia Espacial Europea y Suiza, fabricado en España, tiene la intención de observar estrellas brillantes que ya se sabe que están orbitadas por exoplanetas.
Se enfocará en planetas que van desde el tamaño de la Tierra hasta el tamaño de Neptuno, midiendo cambios minúsculos en el brillo de las estrellas a medida que los planetas se mueven a través de su disco.
Esto, con el objetivo de proporcionar una medición precisa del tamaño de los planetas, que los científicos esperan combinar con información separada sobre sus masas para determinar su densidad.
La agencia dice que la densidad de un planeta "proporciona pistas vitales sobre su composición y estructura, indicando, por ejemplo, si es predominantemente rocosa o gaseosa, o tal vez alberga océanos importantes".
El cohete Soyuz también debía transportar un satélite de observación de la Tierra para la Agencia Espacial Italiana y varias cargas útiles más pequeñas.
