SANTIAGO.- "Este fue un gran año para la ciencia, pero ¿qué podría ser más maravilloso que ver un agujero negro? Suena a magia, pero fue realmente una hazaña asombrosa de trabajo en equipo y tecnología", expresó Tim Appenzeller, el editor de noticias en Science, luego de que la revista calificara la imagen de una región finita como el avance científico más importante de 2019. Un hecho considerado histórico para la astronomía, del cual Chile podría entregar nuevas luces.
Se trata de la anaranjada imagen de un agujero negro ubicado a más de 50 millones de años luz de la Tierra, dada a conocer el 10 de abril de forma simultánea a nivel mundial, la cual fue capturada gracias al proyecto astronómico Events Horizon Telescope (EHT), que reunió a telescopios de México, España, Estados Unidos, la Antártida y de nuestro país. La cual de por sí logra confirmar la teoría de la relatividad del físico alemán Albert Einstein, por la forma cúbica del objeto celeste.
Un descubrimiento ceñido por la maniobra y la colaboración internacional, que contó con la participación de ALMA y el Observatorio Austral Europeo (ESO) acá en Chile. El cual se logró rigurosamente gracias a la precisión de ocho radiotelescopios, que realizaron la misma observación a la galaxia Messier 87 al mismo tiempo. Una dinámica realizada bajo la técnica de la interferometría, donde los aparatos funcionan a la par desde la lejanía.
"Conectarlos fue un desafío y una de las maneras por la cual fue posible hacerlo fue gracias a ALMA, ya que siendo más grande ayudó a buscar las señales leves y reunirlas todas. Sin nuestro cielo especial, el aire limpio que tenemos y las condiciones atmosféricas —además de la técnica— no habría sido posible", subraya a Emol la astrónoma italiana Violette Impellizzeri que desde 2011 forma parte del observatorio internacional.
Con ella se encuadra el ingeniero eléctrico Alejandro Sáez, que tuvo como rol adaptar ALMA desde el área instrumental para hacer este tipo de observación y conexión. "Fue obviamente una sorpresa súper positiva. También en lo personal debo reconocer que no pensé que esto podía llegar a tener la repercusión que ha tenido hasta el momento. Sabíamos cuando empezamos a trabajar en esto, hace harto tiempo ya, que era súper relevante lo que se estaba haciendo, pero nunca llegué a dimensionar que podíamos llegar a este nivel de reconocimiento internacional", dice quien sería el único chileno viviendo Chile involucrado en el proyecto.
Una gran satisfacción que comparten también al interior de la ESO, que desde el llano de Chajnantor en Atacama ayudaron a recoger datos del agujero negro con el telescopio APEX. "
Es un reconocimiento a años de trabajo y grandes inversiones que resultan en potentes observatorios astronómicos que pueden ser y son utilizados por equipos científicos para hacer grandes descubrimientos como este caso", indicó a este medio el director general de la organización europea,
Xavier Barcons.
Pero el equipo del EHT no sólo cierra el año con la mención en Science, sino también con el reconocimiento al mejor Avance 2020 en Física Fundamental, entregado por los Premios Breakthrough. El galardón considerado "el Nobel de la ciencia", el cual se les adjudicó en septiembre junto a una suma de tres millones de dólares, compartidos equitativamente entre los 347 científicos coautores de sus publicaciones relacionadas.
Para Impellizeri la buena racha del registro "es como una fiesta que sigue dando" y esto no termina aquí, deslizando que en 2020 se podrían venir otras buenas nuevas. "Significa que la gente realmente se interesa, por lo que tenemos que hacer más ¡Y estamos haciendo más! ALMA se está preparando para seguir observando (...) Sí a los científicos nos gusta confirmar teorías, pero también nos gustan las sorpresas", cierra la astrónoma al otro lado del teléfono.