Un trozo de 500 gramos de salmón sin piel ni espinas, 4 chalotas cortadas en pluma, 1 cucharada de azúcar rubia, 6 a 8 tomates deshidratados (marinados en aceite de oliva) y en julianas, sal y pimienta a gusto.
Para el aliño: 6 cucharadas de salsa de soya (de preferencia light), el jugo de un limón, media cucharada de jengibre rallado fino, 2 cebollines en ruedas muy finas, sal, pimienta a gusto y 6 cucharadas de aceite de oliva.
Congelar levemente el pescado y después con un cuchillo muy afilado cortarlo en finas láminas. Poner sobre un plato y reservar al frío tapado con alusaplas. En una sartén dorar las chalotas con aceite de oliva, añadir el azúcar rubia y dejar que se caramelicen sin que se quemen, a fuego suave por alrededor de 15 minutos. Aliñar con sal y pimienta. Reservar y dejar enfriar.
Para el aliño mezclar todos los ingredientes en un bol revolviendo con batidor de alambre. En un plato de servir, extender las láminas de salmón y rociar con el aliño de soya y limón. Poner encima hilos de chalota acaramelada y los tomates deshidratados. Servir de inmediato.