Tiene tres hermanos y una hermana, él es el tercero de los cinco. Todos son cercanos al arte: Antonio trabaja con Boris y es el director de fotografía, uno es director de museo en Punta Arenas y otro es pintor.
-¿Por qué decidiste estudiar teatro?
"Nooo, desde el colegio estaba en el grupo de teatro, es como bastante común mi historia. En la enseñanza media, cuando uno tiene que empezar a decidir, yo estaba por el lado de las letras y teníamos un buen grupo de teatro en el colegio, había una buena infraestructura para eso y… ¡nada! Mis padres me apoyaron cien por ciento, aunque no eran tiempos tan obvios, pero ellos son personas bien cultas y les gustó la idea y todo".
Separado hace unos años, tiene una nueva pareja y tres hijas de su primer matrimonio: Canela (16), Ágata (14) y Lucero (9), a las que tiene fin de semana por medio con él.
-¿Tienes buena relación con tu ex mujer?
"Muy buena relación. Muy, muy buena, donde nuestro principal objetivo es criar a nuestras hijas en común. Tratamos de ser lo menos egoístas posibles en ese sentido y ser padre significa, de alguna manera, sacrificarse; no se puede ser padre sin una cuota de sacrificio. Con la madre de mis hijas hemos depuesto actitudes personales en pro de que tenemos que criar".
Se ríe a carcajadas cuando se le pregunta por su tiempo libre, pero dice que la verdad es que lo que más le gusta es pasarlo en familia, con sus hijas, su pareja, sus padres, sus hermanos y los amigos, "comiendo y cocinando… cocinar me gusta harto".
-¿Cocinar qué?
"Generalmente cocina italiana, pero sin recetas, sino que inventando bastante…Ñoquis, aunque son bien trabajosos, pero los hago como los hacía mi abuela.
"La cocina se conecta mucho con la vida familiar; ponerse a cocinar algo, tomándose unos vinos es un panorama súper bueno para mí".
-Aparte de cocinar, ¿ayudas en la casa?
"Antes no tanto, pero con esta nueva vida mía he aprendido a ser más ordenado, a lavar la loza, a hacer la cama".
-¿Mudaste alguna vez?
"Sí, eso sí, siempre. Lo que pasa es que cuando uno está en familia, siempre tiene a alguien que le ayude en la casa, pero cuando uno vuelve a ser soltero, tiene que volver a la vida que tenía antes".
Cuenta que se casó joven, a los 23, y tuvo su primera hija al tiro, así que se había olvidado un poco de lo que era ser soltero. "Hay que hacer varios menesteres domésticos, como lavar la ropa y esas cosas, que los tenía medio olvidados. Así que soy bien ayudador".
Tampoco ayudó mucho de niño, porque, pese a ser cinco hermanos, su madre era de origen eslavo y su abuela también vivía en la casa, así que los regaloneaban mucho.
-¿Practicas algún deporte?
"No, no, ningún deporte; a veces troto un poco. Me gusta ver algunos deportes, buenos partidos de fútbol o de tenis".
-¿Gustos musicales?
"Muy, muy variados. Ehhh, me gusta todo tipo de música; no soy muy fan de ningún grupo ni nada de eso".
En este último tiempo se ha dedicado a leer filosofía –"escapando un poco de las novelas"-. Está leyeno "Un año con Schopenhauer" y algunas cosas del filósofo francés Montaigne ; también ensayos y algunas cosas de Woody Allen y de Bergman. "Tengo varios libros en la cabecera que voy escogiendo; también me gusta mucho la poesía", cuenta.
- ¿Siempre eres tan lúdico como cuando posaste para las fotos?
"Trato de tomarme la vida livianamente y no podría ser de otra forma si uno quiere hacer comedia, porque siento que el mundo es bien cruel y bien terrible y muy concreto. Hay varias visiones respecto al tema; hay una que es bien pesimista, pero realista –yo encuentro, el mundo es bien cruel para ser vivido y no hay que tener mucha sensibilidad si uno quiere vivir sanamente… si no no podrías resistir lo que pasa en Líbano, por ejemplo.
"Además que uno, como ser inteligente y con acceso a la información, puede bucear un poco y ver el verdadero infierno que se vive en algunos lugares del mundo. Esto es algo que a lo que yo me refiero en mi blog".
-Pero, ¿qué postura tomas tú?
"Yo soy bastante realista, ni me ensueño ni creo en seres superiores u otras vidas; creo que todo ser viviente está destinado a perecer. Entonces, viviendo en este mundo con tanta crueldad concreta, hay que encontrar algún camino de salida. El mío es el que tienen mis películas: reconocer esa crueldad, pero encontrar dentro de eso, caminos de sobrevivencia, que tienen que ver con la ternura, la solidaridad, el amor bien entendido (el amor malentendido también te puede hundir).
-¿Deseos no cumplidos?
"Sí, muchísimos. Pero algunos filósofos concuerdan en que hay que tratar de desear lo menos posible, porque el deseo es uno de los grandes caminos a la frustración. Así que, la verdad, intento tomar los caminos que puedo lograr y no ponerme metas imposibles".
-¿Vicio privado?
"Bueno un poco te dije… la vida familiar, pero yo disfruto mucho trabajando, también. Claro, a veces uno se agota y hay que tratar de parar la máquina. Cuando me toca escribir sin tiempos, lo paso muy bien, disfruto, gozo, siento placer. Lo mismo cuando las cosas resultan.
"También hay otras cosas de lo cotidiano, como ver televisión y leer y mantener el equilibrio entre ambas actividades. Me encanta seguir todos los vaivenes de las estrellas de televisión y del espectáculo".
-¡¿La farándula!?
"Sí, disfruto mucho de eso, porque es como un pequeño teatro; me encanta y no tengo prejuicios al respecto".